La Radioterapia Conformada Tridimensional (RTC) es una técnica avanzada utilizada en el tratamiento del cáncer, especialmente en el campo de la oncología radioterápica. Esta modalidad terapéutica se ha convertido en un pilar fundamental en la lucha contra el cáncer, ofreciendo una mayor precisión y eficacia en la administración de la radiación.

¿Qué es la radioterapia conformada tridimensional?

La radioterapia conformada tridimensional es un tipo de radioterapia externa que utiliza imágenes tridimensionales para planificar y administrar dosis de radiación de manera precisa sobre el área afectada por el cáncer.

A diferencia de las técnicas convencionales, que aplican radiación en forma de haz uniforme, la RTC permite moldear la radiación según la forma y tamaño exactos del tumor, minimizando así el daño en los tejidos sanos circundantes.

¿Cómo se realiza?

El proceso de Radioterapia Conformada Tridimensional comienza con la adquisición de imágenes detalladas del área afectada mediante técnicas como la tomografía computarizada (TC) o la resonancia magnética (RM). Estas imágenes tridimensionales proporcionan información precisa sobre la forma, tamaño y ubicación del tumor, así como de los órganos y tejidos circundantes.

Con la ayuda de programas informáticos especializados, los oncólogos radioterápicos diseñan un plan de tratamiento personalizado, definiendo las áreas que necesitan recibir radiación y aquellas que deben protegerse. Este proceso de planificación permite ajustar la intensidad y dirección del haz de radiación, asegurando que el tumor reciba la dosis adecuada mientras se minimiza la exposición de los tejidos sanos.

Una vez que se ha diseñado el plan de tratamiento, se procede a administrar la radioterapia utilizando equipos de alta tecnología, como aceleradores lineales, que emiten haces de radiación precisamente dirigidos al área afectada. Durante las sesiones de tratamiento, el paciente permanece acostado en una posición cómoda y se asegura que el haz de radiación incida exactamente según lo planificado.

Ventajas de la radioterapia conformada tridimensional

La Radioterapia Conformada Tridimensional ofrece numerosas ventajas tanto para los pacientes como para los profesionales médicos:

• Mayor precisión: al utilizar imágenes tridimensionales para guiar el tratamiento, la RTC permite una administración más precisa de la radiación, reduciendo al mínimo el daño en los tejidos sanos.
• Menos efectos secundarios: al proteger los tejidos circundantes, la RTC puede reducir la incidencia de efectos secundarios adversos asociados con la radioterapia convencional.
• Mejora en los resultados: la capacidad de adaptar la radiación al contorno exacto del tumor puede conducir a una mayor tasa de control local y supervivencia en los pacientes.
• Mayor comodidad para el paciente: la planificación personalizada y la precisión en la administración del tratamiento pueden contribuir a una experiencia más cómoda y tolerable para el paciente durante el proceso de radioterapia.