Bajo rendimiento escolar

¿Qué es el bajo rendimiento escolar?

Se llama bajo rendimiento escolar a la situación en la que se encuentran aquellos alumnos que obtienen poco provecho en los estudios. Esto se traduce en calificaciones bajas y lagunas de conocimiento en aspectos esenciales. Se trata de una problemática relativamente frecuente y tratada normalmente por especialistas en Psicología. El tratamiento de esta dependerá de la causa por la cual ese alumno no logra un rendimiento escolar dentro de la norma. Por tanto, en este sentido, lo más importante es buscar su origen.

El bajo rendimiento escolar afecta a los alumnos
que obtienen poco provecho de los estudios.

 

¿Cuáles son los síntomas?

La sintomatología del bajo rendimiento escolar puede variar de un niño a otro. Sin embargo, en términos generales, estos síntomas vienen definidos por el propio nombre del problema: el niño no rinde en los estudios. No obstante, esta problemática no solo está asociada a la obtención de calificaciones altas o bajas, sino que entraña otras muchas señales derivadas, como:

  • Lagunas importantes de conocimiento.
  • Dificultades de atención o concentración.
  • Desinterés por el estudio.
  • Aburrimiento en clase.
  • Dificultades de comprensión de conceptos básicos.
  • Aparentes problemas de memoria.
  • Problemas con los compañeros de clase.

¿Qué causas están asociadas al bajo rendimiento escolar?

Las causas del bajo rendimiento escolar son múltiples y pueden coexistir entre ellas. Por esta razón, es importante que la situación particular sea estudiada por un especialista en Psicología, quien llevará a cabo una evaluación psicológica integral para detectar por qué el niño no rinde igual que otros compañeros. Así, algunas de las posibles causas del bajo rendimiento escolar son:

  • Dificultades de tipo cognitivo.
  • Problemas de comprensión del lenguaje.
  • Dificultades específicas del aprendizaje en lectura y escritura.
  • Problemas de atención o concentración.
  • Problemas de vista, entendida como la agudeza visual con la que nace el niño.
  • Problemas de visión, entendida como la forma en que el cerebro del niño procesa la información que le llega a través de los ojos. A diferencia del punto anterior, esto es algo que el niño puede aprender.
  • Problemas auditivos.
  • Problemas emocionales, como ansiedad, estrés, baja autoestima o problemas en el hogar.
  • Metodología y hábitos de estudio inadecuados.

En cualquiera de los contextos anteriores, es fundamental identificar qué tipo de dificultad presenta el niño y cuál es el origen de la misma a través de pruebas específicas.

¿Cómo es su tratamiento?

Dado que, a largo plazo, el bajo rendimiento escolar puede transformarse en el origen de problemas emocionales como baja autoestima, inseguridad o cambios de humor, es fundamental que todo niño que presente esta problemática sea atendido. No obstante, no existe un tratamiento único para el bajo rendimiento escolar y este será abordado de una manera completamente diferente dependiendo de la causa identificada como clave para explicarlo, de la edad del niño en el momento de diagnóstico y del tipo de intervención que quiera llevarse a cabo. Por ejemplo, será muy diferente el caso de un niño que presente bajo rendimiento escolar como consecuencia de metodología y hábitos de estudio inadecuados, al de un niño que sufra esta problemática porque presenta dificultades cognitivas o problemas de vista.

En cualquier caso, independientemente de la edad y causa del bajo rendimiento en la escuela, siempre es posible implementar estrategias de rehabilitación llevadas a cabo por diferentes especialistas en función de la causa y que, en menor o mayor grado, favorecerán los procesos de desarrollo del niño.

¿Qué especialistas lo tratan?

En primer lugar, el bajo rendimiento escolar será tratado por un psicólogo infantil especializado en psicodiagnóstico, quien practicará una evaluación psicológica integral que abarque todas las áreas de desarrollo del niño: cognitiva, lenguaje, percepción, conducta, emoción, etc. Así pues, sobre esa base, se alcanzará un diagnóstico del origen de las dificultades escolares del niño.

Una vez identificadas las causas, si existe un aspecto emocional en las mismas, este deberá ser atendido por el especialista en Psicología infantil. De la misma manera, será necesario derivar al niño a otros especialistas para practicar estudios específicos o realizar un tratamiento concreto cuando las causas corresponden a otra área, como la logopedia, la psicopedagogía o la neurología.

¿Qué deben hacer los padres de un niño con bajo rendimiento escolar?

En el caso de los niños afectados por un bajo rendimiento escolar, los padres representan un rol fundamental de apoyo y contención para el niño. En este sentido, algunas medidas para ayudar a sus hijos en el tratamiento de esta problemática son:

  • Brindarle la oportunidad de ser atendido por un especialista.
  • Ofrecerle la ayuda, comprensión y planificación que necesita para desarrollar mejores habilidades prácticas en la escuela.
  • Establecer un ambiente con normas y límites claros, horarios, estructura y un espacio apropiado para que pueda hacer los deberes con tranquilidad y concentrarse mejor.
  • Apoyarlo en las áreas con las que tiene dificultad o aquellas que requieran ser explicadas por un adulto. El apoyo parental en el aprendizaje es indispensable para fomentar el amor al estudio.
  • Brindarle oportunidades de aprender por experiencia, con juegos, actividades al aire libre, etc.
  • Transmitirle confianza y seguridad en sí mismo, independientemente de las calificaciones escolares.
19-01-2024
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Bajo rendimiento escolar

Gladys Veracoechea Troconis - Psicología Infantil y Juvenil

Creado el: 09-06-2023

Editado el: 19-01-2024

¿Qué es el bajo rendimiento escolar?

Se llama bajo rendimiento escolar a la situación en la que se encuentran aquellos alumnos que obtienen poco provecho en los estudios. Esto se traduce en calificaciones bajas y lagunas de conocimiento en aspectos esenciales. Se trata de una problemática relativamente frecuente y tratada normalmente por especialistas en Psicología. El tratamiento de esta dependerá de la causa por la cual ese alumno no logra un rendimiento escolar dentro de la norma. Por tanto, en este sentido, lo más importante es buscar su origen.

El bajo rendimiento escolar afecta a los alumnos
que obtienen poco provecho de los estudios.

 

¿Cuáles son los síntomas?

La sintomatología del bajo rendimiento escolar puede variar de un niño a otro. Sin embargo, en términos generales, estos síntomas vienen definidos por el propio nombre del problema: el niño no rinde en los estudios. No obstante, esta problemática no solo está asociada a la obtención de calificaciones altas o bajas, sino que entraña otras muchas señales derivadas, como:

  • Lagunas importantes de conocimiento.
  • Dificultades de atención o concentración.
  • Desinterés por el estudio.
  • Aburrimiento en clase.
  • Dificultades de comprensión de conceptos básicos.
  • Aparentes problemas de memoria.
  • Problemas con los compañeros de clase.

¿Qué causas están asociadas al bajo rendimiento escolar?

Las causas del bajo rendimiento escolar son múltiples y pueden coexistir entre ellas. Por esta razón, es importante que la situación particular sea estudiada por un especialista en Psicología, quien llevará a cabo una evaluación psicológica integral para detectar por qué el niño no rinde igual que otros compañeros. Así, algunas de las posibles causas del bajo rendimiento escolar son:

  • Dificultades de tipo cognitivo.
  • Problemas de comprensión del lenguaje.
  • Dificultades específicas del aprendizaje en lectura y escritura.
  • Problemas de atención o concentración.
  • Problemas de vista, entendida como la agudeza visual con la que nace el niño.
  • Problemas de visión, entendida como la forma en que el cerebro del niño procesa la información que le llega a través de los ojos. A diferencia del punto anterior, esto es algo que el niño puede aprender.
  • Problemas auditivos.
  • Problemas emocionales, como ansiedad, estrés, baja autoestima o problemas en el hogar.
  • Metodología y hábitos de estudio inadecuados.

En cualquiera de los contextos anteriores, es fundamental identificar qué tipo de dificultad presenta el niño y cuál es el origen de la misma a través de pruebas específicas.

¿Cómo es su tratamiento?

Dado que, a largo plazo, el bajo rendimiento escolar puede transformarse en el origen de problemas emocionales como baja autoestima, inseguridad o cambios de humor, es fundamental que todo niño que presente esta problemática sea atendido. No obstante, no existe un tratamiento único para el bajo rendimiento escolar y este será abordado de una manera completamente diferente dependiendo de la causa identificada como clave para explicarlo, de la edad del niño en el momento de diagnóstico y del tipo de intervención que quiera llevarse a cabo. Por ejemplo, será muy diferente el caso de un niño que presente bajo rendimiento escolar como consecuencia de metodología y hábitos de estudio inadecuados, al de un niño que sufra esta problemática porque presenta dificultades cognitivas o problemas de vista.

En cualquier caso, independientemente de la edad y causa del bajo rendimiento en la escuela, siempre es posible implementar estrategias de rehabilitación llevadas a cabo por diferentes especialistas en función de la causa y que, en menor o mayor grado, favorecerán los procesos de desarrollo del niño.

¿Qué especialistas lo tratan?

En primer lugar, el bajo rendimiento escolar será tratado por un psicólogo infantil especializado en psicodiagnóstico, quien practicará una evaluación psicológica integral que abarque todas las áreas de desarrollo del niño: cognitiva, lenguaje, percepción, conducta, emoción, etc. Así pues, sobre esa base, se alcanzará un diagnóstico del origen de las dificultades escolares del niño.

Una vez identificadas las causas, si existe un aspecto emocional en las mismas, este deberá ser atendido por el especialista en Psicología infantil. De la misma manera, será necesario derivar al niño a otros especialistas para practicar estudios específicos o realizar un tratamiento concreto cuando las causas corresponden a otra área, como la logopedia, la psicopedagogía o la neurología.

¿Qué deben hacer los padres de un niño con bajo rendimiento escolar?

En el caso de los niños afectados por un bajo rendimiento escolar, los padres representan un rol fundamental de apoyo y contención para el niño. En este sentido, algunas medidas para ayudar a sus hijos en el tratamiento de esta problemática son:

  • Brindarle la oportunidad de ser atendido por un especialista.
  • Ofrecerle la ayuda, comprensión y planificación que necesita para desarrollar mejores habilidades prácticas en la escuela.
  • Establecer un ambiente con normas y límites claros, horarios, estructura y un espacio apropiado para que pueda hacer los deberes con tranquilidad y concentrarse mejor.
  • Apoyarlo en las áreas con las que tiene dificultad o aquellas que requieran ser explicadas por un adulto. El apoyo parental en el aprendizaje es indispensable para fomentar el amor al estudio.
  • Brindarle oportunidades de aprender por experiencia, con juegos, actividades al aire libre, etc.
  • Transmitirle confianza y seguridad en sí mismo, independientemente de las calificaciones escolares.
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