¿Conoces la fisioterapia respiratoria?

La fisioterapia respiratoria consiste en mejorar el proceso de respiración mediante un conjunto de técnicas y maniobras. Dichas técnicas facilitan la expulsión de mucosidad innecesaria, mejoran el funcionamiento de la musculatura respiratoria y la eficiencia de cada respiración. Este tratamiento debe ser aplicado por un fisioterapeuta colegiado, con formación específica en fisioterapia respiratoria.

¿En qué clase de tratamientos está indicadas?

La fisioterapia respiratoria es muy útil para aquellas personas que padecen alguna de las siguientes patologías:

• EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
• Bronquiectasias.
• Procesos patológicos parénquimatosos.
• Fibrosis quística.
• Alteraciones de la pared torácica y diafragmática.
• Enfermedad pulmonar ocupacional.
• Neumonía.
• Atelectasia.
• Enfermedades neuromusculares.
• Enfermedades respiratorias infantiles: bronquiolitis, asma o infección respiratoria aguda, entre otras.

Asimismo, también pueden beneficiarse aquellas personas que hayan pasado por un proceso quirúrgico con alguna complicación pulmonar, o pacientes que hayan sufrido un largo encamamiento o respiración mediante ventilación mecánica. Este segundo grupo incluye a personas que hayan padecido la Covid-19 durante la pandemia, por ejemplo.

¿Qué tipo de ejercicios existen?

Las técnicas empleadas en fisioterapia respiratoria conllevan la movilización de la pared torácica y la normalización de la musculatura implicada. En caso de ser necesario, mediante la tos consciente o reflejos, se facilita la expulsión de la mucosidad y secreciones que dificultan la adecuada respiración. Todas estas técnicas se llevan a cabo en un entorno de total seguridad y mediante maniobras que en ningún caso son dolorosas.

Los beneficios de la fisioterapia respiratoria

La fisioterapia respiratoria ayuda a reducir los síntomas de distintas patologías como las que se han mencionado anteriormente. También cabe destacar que facilita la efectividad de la medicación y, concretamente en niños, mejoran antes que aquellos que no realizan este tratamiento de fisioterapia. Cuando los pequeños mejoran, además,  conseguimos reducir el nivel de estrés que provocan estas situaciones en casa, siendo beneficioso para todos los implicados.