Nefrolitotomía percutánea
¿Qué es la litotricia percutánea?
La litotricia percutánea, también conocida como nefrolitotomía percutánea o NLP, es un procedimiento endoscópico que permite la extracción de los cálculos renales mediante la introducción de instrumentos como el nefroscopio, las sondas de litotricia (láser, ultrasonido, etc.) y las pinzas a través de un paso entre el parénquima renal y la piel.
¿Por qué se realiza?
La litotricia percutánea se considera la terapia más apropiada para tratar las siguientes afecciones:
- Cálculos renales de tamaño superior a 2 cm
- Caliceales con un tamaño superior a 1,5 cm
- Calculosis en el divertículo caliceal
- Alteraciones anatómicas que no permiten la eliminación de cálculos cistínicos de tamaño superior a 1,5 cm
No está indicado recurrir a esta técnica en caso de:
- Infecciones del tracto urinario, especialmente si son agudas
- Coagulopatías
- EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica)
- Deformidades esqueléticas que impiden que el paciente se coloque en la posición adecuada para realizar el procedimiento
¿En qué consiste?
La nefrolitotomía percutánea tiene una duración variable (40-150 minutos), se realiza generalmente bajo anestesia general o epidural alta con el paciente en posición prona. Consiste en la colocación de un catéter ureteral por parte del especialista en Urología para insertar después una aguja en las cavidades renales a través de las cuales se introducirá también el nefroscopio. El cálculo renal se fragmentará entonces gracias a las sondas que pueden ser de ultrasonidos o utilizar energía balística, láser o electrohidráulica (el tipo de energía utilizado varía según la dimensión y la consistencia del cálculo).
Preparación para la litotricia percutánea
Antes de realizar una nefrolitotomía percutánea, el paciente tiene que someterse a una profilaxis con antibióticos siguiendo las instrucciones del especialista.
Recuperación después del tratamiento
Después de una NLP se realizará un control radiológico, si es necesario mediante contraste, para comprobar la eliminación correcta de los cálculos renales. El especialista también recomendará controles periódicos para prevenir eventuales recaídas y, tras 8-10 días de la eliminación, el paciente podrá reanudar sus actividades diarias normales.
Tratamientos alternativos
Un tratamiento alternativo para la extracción de los cálculos renales es la intervención quirúrgica (pielolitotomía) a cielo abierto que prevé una incisión en la cadera y, después de colocar un catéter ureteral autoestático, la ejecución repetida de litotripsis extracorpóreas con ondas de choque. Sin embargo, esta técnica implica una expulsión más lenta de los cálculos, con riesgo de infección y pérdida funcional del riñón.