Huella estética: ¿cuáles son los efectos de los tratamientos de Medicina Estética?

Conforme avanza el tiempo, se observa un creciente interés en los tratamientos de Medicina Estética y su impacto en nuestra apariencia. Uno de los conceptos más recientes que ha surgido es el de la "huella estética".
 

La huella estética refleja los efectos y resultados, tanto positivos como negativos, que pueden dejar los tratamientos de Medicina Estética en nuestro aspecto. Esto está intrínsecamente ligado a la ejecución del tratamiento y al seguimiento adecuado de las indicaciones proporcionadas por el especialista en Cirugía plástica, estética y reparadora que realiza la intervención.
 

¿En qué consiste la huella estética?

Este concepto se desglosa en dos formas fundamentales:
 

• Huella estética positiva mediante regeneración de tejidos: el objetivo principal de cualquier tratamiento estético es lograr una regeneración de los tejidos. Esto implica un soporte en áreas propensas a arrugas o pérdida de volumen debido a la edad. Los productos utilizados internamente ayudan a revitalizar la piel, otorgándole una apariencia más tersa, luminosa e hidratada.
   
• Huella estética negativa debido a residuos o exceso de producto: cuando los tratamientos no se ejecutan de manera correcta, o no se respetan los parámetros establecidos, es probable que el resultado no sea el deseado, pudiendo incluso perjudicar nuestra imagen. Si el organismo no logra eliminar por completo el producto o si se repiten inyecciones sin respetar los periodos de degradación, las secuelas pueden persistir en el tiempo.

¿Cómo podemos evitar una huella estética negativa?

Para evitar una huella estética negativa, es crucial acudir a profesionales capacitados, como el Dr. Pedro Pérez-Escariz Sánchez, quien analiza las necesidades individuales y adapta los productos -siempre de calidad y de marcas reconocidas-, así como los procedimientos y sesiones, considerando las características únicas de cada rostro. Además, la intervención debe llevarse a cabo en un entorno adecuado, garantizando la esterilidad de los materiales conforme a los estándares higiénico-sanitarios.