¿Qué son los ultrasonidos focalizados?
Los ultrasonidos son ondas vibratorias y sonoras de distintas frecuencias que no son perceptibles por el oído humano. Los beneficios de los ultrasonidos focalizados son que afectan únicamente un punto preciso y deseado sin provocar efecto alguno en otros puntos colindantes.
Es un tratamiento utilizado en medicina estética o en dermatología con la finalidad de mejorar los aspectos de la piel, como el lifting, mejorar la tonicidad o la hidratación, entre otros.
¿En qué consisten?
En primer lugar, se aplica un gel y, después, a través de un dispositivo se van enviando impactos, ultrasonidos focalizados, a diferentes profundidades en la zona a tratar.
Los ultrasonidos se transforman en calor, entre 70 y 80 grados, lo que causa la dilatación de los folículos pilosos y las glándulas sudoríparas, creación de colágeno y un incremento del riego sanguíneo.
Una sesión dura aproximadamente de 45 a 90 minutos dependiendo de la zona.
¿Para qué sirven?
Este tratamiento indoloro puede servir tanto como tratamiento terapéutico para aliviar dolores pero es más popular en medicina estética y dermatología ya que permite mejorar el aspecto de la piel.
Tratamientos terapéuticos:
- Aumento del riesgo sanguíneo.
- Cambio en la viscosidad.
- Efecto analgésico.
- Relajación muscular.
Tratamientos estéticos:
Cuidados tras la intervención
Tras la aplicación de los ultrasonidos focalizados pueden aparecer enrojecimientos de la zona o edemas, aun que desaparecen rápidamente. Si el tratamiento no se ha realizado correctamente pueden existir lesiones tiroideas o neurológicas, por ello es importnte buscar centros y profesionales especializados para someterse a este tipo de tratamientos.
Contraindicaciones del tratamiento
Las mujeres embarazadas o que estén amamantando, los pacientes con hernias, marcapasos, lesiones de piel o pacientes hemorrágicos no deben someterse a este tratamientos.