Cabe señalar la diferencia entre técnicas, métodos y conocimientos necesarios por parte del odontopediatra, ya que la dentadura y la boca de los menores se encuentran en un constante proceso de formación y desarrollo.
Los dientes de leche salen entre los seis y los veinticuatro meses de edad, comenzando por los incisivos dentales inferiores. Conforme avanzan los años, los dientes de leche comienzan a sustituirse progresivamente por los dientes definitivos hasta pasados los doce o trece años.
¿Qué enfermedades trata el odontopediatra?
Las patologías y problemas bucodentales que pueden surgir en la infancia son múltiples:
- Caries: la aparición de la caries dental es cada vez más frecuente en niños. De hecho se habla de caries del biberón. El odontopediatra se encarga de tratar su aparición, y de su prevención.
- Traumatismos: los golpes y las caídas son habituales en niños, y es habitual que éstos sufran la pérdida o la rotura de alguna pieza dental tras caídas o golpes. Pueden necesitar restauración o reimplante dental.
- Maloclusión y alteraciones en la posición de piezas dentales: se estudian posibles alteraciones en la mordida que puedan necesitar un tratamiento ortodóntico. En este caso, se derivará al niño a un ortodontista.
- Alteraciones congénitas: afectan al tamaño, al número y a la forma de las piezas dentales.
- Anquilosis de pieza temporal: un traumatismo provoca una necrosis en la pulpa del diente, que se vuelve negro y que dificulta la erupción de la nueva pieza dental.
¿Cuándo hay que ir al odontólogo pediátrico?
En el caso de que los padres no observen nada relevante en la dentadura de su hijo, se aconseja que la primera visita al odontopediatra sea en torno a los cuatro años. El especialista evaluará y supervisará su cepillado, y realizará una exploración visual buscando posibles problemas o anomalías. A los seis años, se supervisa el crecimiento facial y el encaje de las primeras muelas y piezas dentales.
En función de la salud dental del menor, las visitas periódicas al odontopediatra se realizarán una vez cada seis meses o una vez al año, en función de la salud dental y del desarrollo bucodental del niño.
El odontopediatra es el encargado de tratar también a niños con necesidades especiales, como discapacidades físicas, mentales o sensoriales. En este caso, el especialista está especializado con técnicas psicológicas, tiene la capacidad o conoce técnicas para relajar al niño y tiene la capacidad para actuar ante situaciones inesperadas.
Los niños con necesidades especiales incluyen las siguientes:
- Pacientes con autismo
- Pacientes con TDAH
- Pacientes con problemas oncológicos
- Pacientes con diabetes
- Pacientes con problemas de coagulación
Es en este tipo de pacientes en que existe más probabilidades de sufrir problemas de traumatismos, bruxismo, mala posición de piezas dentales, gingivitis, halitosis…