Es un trastorno caracterizado por dificultades en la correcta adquisición de las habilidades en matemáticas, que afectan de una manera significativa al rendimiento académico o en las actividades de la vida cotidiana que requieren capacidad para el cálculo.
En ningún caso este trastorno es causa de un déficit sensorial o enfermedad médica.
La discalculia refleja dificultades en matemáticas. Sin embargo, en el resto de materias el niño o niña evoluciona con total normalidad y su rendimiento académico se sitúa en valores normales.
La discalculia se describe en una subcategoría dentro de los trastornos del neurodesarrollo llamada “trastorno específico del aprendizaje”.
Tipos de discalculia
- Primaria: dificultad relacionada con una lesión a nivel neurológico.
- Secundaria: asociada a una baja capacidad de razonamiento y orientación espacio–temporal. Se caracteriza por una mala utilización de los símbolos numéricos.
- Disamétrica: dificultad para la resolución de operaciones y problemas.
- Espacial: Presentan dificultad para ordenar y estructurar números.
Síntomas
El niño o niña puede presentar dificultad para:
- Entender el significado de cantidades o conceptos como mayor que y menor que.
- Entender que el número 5 es lo mismo que la palabra cinco, y que ambos significan cinco cosas.
- Recordar datos matemáticos, como las tablas de multiplicar.
- Contar dinero o calcular el cambio.
- Estimar el tiempo.
- Estimar la velocidad o la distancia.
- Entender la lógica de las matemáticas.
- Retener los números en la mente al resolver problemas.
Evaluación
El diagnóstico de la discalculia debe realizarse mediante pruebas específicas incluidas en una evaluación neuropsicológica más general. No obstante, hay que tener en cuenta que el diagnóstico sólo debería realizarse a partir de finales de primero de educación primaria (6-7 años), siendo incluso más preciso si se realiza a partir de 2º de educación primaria.
El período crítico para el aprendizaje numérico se sitúa entre los 4 y los 7 años, por lo que puede haber diferencias en el ritmo de aprendizaje entre unos niños/as y otros. Pasado este período crítico, si hay dificultades, hay que detectarlas y reeducarlas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que hay niños con dificultades en las matemáticas y no por ello presentan discalculia.
¿Cuáles son las causas de la discalculia?
Los investigadores han detectado dos posibles causas de la discalculia:
- Genes y herencia: La discalculia se presenta en miembros de la misma familia. La investigación muestra que los genes podrían jugar un papel en las dificultades con las matemáticas.
- Desarrollo cerebral: Los estudios de imágenes cerebrales han mostrado algunas diferencias entre las personas con y sin discalculia. Las diferencias tienen que ver con la estructura y el funcionamiento de áreas que están relacionadas con las habilidades del aprendizaje.