Tendinitis o tendinosis: causas, síntomas y tratamiento
Escrito por:La tendinitis o tendinosis es la inflamación de un tendón. Aunque comúnmente los dos términos se entienden como la misma enfermedad, requieren tratamientos diferentes. La tendinitis hace referencia a lesiones agudas y la tendinosis es una lesión crónica por degeneración o desgaste del tendón.
La tendinitis se refiere a la parte del cuerpo involucrada, por ejemplo, en el tendón de Aquiles. Los especialistas en Traumatología afirman que puede darse en otras partes del cuerpo como el hombro, codo, muñeca, dedo o muslo. Es causada por el uso excesivo de un tendón o una lesión en este. Además puede afectar a personas de cualquier edad, pero es más común entre los adultos que hacen mucho de deporte. Las personas mayores también son susceptibles a la tendinitis porque sus tendones tienden a perder elasticidad y se debilitan a medida que envejecen.
Qué son los tendones
Un tendón es el tejido que une el músculo al hueso. Es flexible, resistente y fibroso. Y se extiende desde el músculo hasta el hueso. Aunque los tendones y los ligamentos son duros y fibrosos, se denominan tejidos blandos debido a su comparación común con el hueso o el cartílago.
Los tendones inflamados (tendinitis) tienen más probabilidades de romperse. Si la vaina alrededor del tendón se inflama, en lugar del tendón en sí, la condición se llama tenosinovitis. Se pueden tener tendinitis y tenosinovitis simultáneamente.
Síntomas de la tendinitis
Dolor, sensación de que el tendón está crepitando a medida que se mueve, hinchazón en la zona afectada además de estar caliente y roja, y desarrollo de bultos.
Si hay una ruptura se puede sentir un hueco en la línea del tendón y el movimiento será muy difícil.
Causas de la tendinitis
La causa principal es la repetición de un movimiento. Además también puede ser causada por una lesión repentina. Se suele desarrollar en personas cuyos trabajos o pasatiempos implican movimientos repetitivos.
Factores de riesgo para la tendinitis
Los tendones con la edad se vuelven menos flexibles, haciéndolos más susceptibles a las lesiones. Además, algunos trabajos pueden ser factor de riesgo por implicar tareas como movimientos repetitivos, posiciones incómodas, vibraciones y esfuerzos vigorosos. Lo mismo ocurre con deportes como las carreras, tenis, natación, baloncesto y golf, ya que implican movimientos repetitivos.
Por otra parte, las personas que padecen diabetes o artritis reumatoide tienen un mayor riesgo de desarrollar tendinitis.
Diagnóstico de la tendinitis
La tendinitis puede ser diagnosticada por el médico de atención primaria sobre la base de los síntomas del paciente y un examen físico. Por otra parte, las radiografías que muestran depósitos de calcio alrededor del tendón pueden ayudar a confirmar un diagnóstico. Por último, las pruebas de imagen, como ultrasonido o resonancia magnética (RM), pueden revelar hinchazón de la vaina del tendón.
Tipos de tendinitis
Entre los diversos tipos de tendinitis se encuentran:
- La tendinitis de Aquiles, una lesión deportiva común que en ocasiones también puede ser causada por zapatos mal ajustados o que no soporten adecuadamente el pie. Es mucho más probable que la padezcan pacientes con artritis reumatoide.
- La tendinitis del supraespinoso o manguito rotador es la que se forma en la parte superior de la articulación del hombro. Este se inflama y causa dolor cuando el brazo se mueve. Si otros tendones en la misma área también se ven afectados, el paciente puede tener síndrome del manguito rotador.
- El codo de tenista o codo de golfista causa dolor en la parte externa del codo. La epidondilitis medial es en el lado interno del codo y es más común entre los golfistas. El dolor a veces irradia hasta la muñeca.
- La tenosinovitis estenosante de DeQuervain es la que provoca una hinchazón en la vaina que rodea los tendones del pulgar.
- El dedo en resorte provoca que el dedo o pulgar haga clic al enderezarse. Se fija en una posición flexionada porque la vaina del tendón en la palma de la mano está engrosada e inflamada. A veces se forma un nódulo a lo largo del tendón.
Tratamientos para la tendinitis
El tratamiento está dirigido a aliviar el dolor y reducir la inflamación. En muchos casos el descanso, la aplicación de bolsas de hielo en la zona afectada y antiinflmatorios locales u orales son todo lo que el paciente necesita. Los síntomas de la tendinitis pueden durar de unos pocos días a varias semanas o meses.
El paciente necesita dejar de hacer lo que causó la tendinitis. Si no es posible una parada total, una reducción significativa en la actividad ayudará a prevenir complicaciones. Para que la inflamación disminuya, el área afectada necesita descansar. Un vendaje, férula o cinta puede ayudar a reducir el movimiento. En casos severos puede ser necesario un yeso. Como posibles tratamientos hay:
- Aplicar una bolsa de hielo o una toalla de agua caliente en la zona afectada pueden aliviar el dolor y la hinchazón. Es importante no aplicar hielo directamente sobre la piel.
- Algunos analgésicos son útiles para tratar el dolor asociado a la tenosinovitis.
- Las inyecciones de corticosteroides también son un posible tratamiento. Sin embargo, las inyecciones repetidas pueden debilitar el tendón aumentando significativamente el riesgo de ruptura.
- Un fisioterapeuta puede manipular y masajear el área afectada proporcionando alivio útil y acelerando el proceso de curación. Un programa de ejercicio específico diseñado para estirar y fortalecer el tendón afectado y el músculo puede ayudar.
- La terapia de ondas de choque o cirugía sirve para casos persistentes. Una onda de choque se pasa a través de la piel, lo que resulta en la separación de los depósitos de calcio. Los depósitos también se pueden extirpar quirúrgicamente.