¿En qué consiste la labioplastia no quirúrgica?

La labioplastia no quirúrgica es una técnica no invasiva o no quirúrgica en la que reducimos el tamaño de los labios vulvares, capuchón del clítoris (labios menores y mayores) cuando están aumentados de tamaño. Se realiza cuando, estéticamente, las pacientes no se sienten a gusto con esta zona de su cuerpo o le son incómodos (funcionalmente) para su vida diaria como la relación sexual, la realización de ejercicios o el uso de algunas ropas ajustadas.

Consiste en la aplicación de una técnica de radiofrecuencia creada para un uso en otras zonas del cuerpo y que, a posterior, creamos un protocolo específico para ello a nivel de los genitales femeninos (aviva protocolo).

¿Qué ventajas tiene respecto a la técnica convencional?

La principal ventaja es que la recuperación es inmediata. Al no realizar exéresis, o sea, uso de bisturí quirúrgico, no se necesita cortar la piel y no necesita suturas; pero, además, es un proceder muy seguro para la paciente.

¿Cuándo es necesario realizar la labioplastia no quirúrgica?

La palabra necesidad, es muy amplia, en realidad la labioplastia se realiza en función de la expectativa de la paciente. Si la paciente tiene unos labios y un capuchón del clítoris muy hipertrófico, o sea, muy aumentados de tamaño y desea tenerlos muy pequeños (dentro de lo armónico) no sería específico para estas pacientes.

En cambio, si la paciente desea una reducción parcial o tiene una hipertrofia moderada y desea sentirse mejor, más a gusto, y que su proceso sea seguro, eficaz, sin intervencionismo quirúrgico, estamos hablando que sí sería incluida en este protocolo de tratamiento.

¿Cuál es el procedimiento?

El procedimiento lo realizamos en un quirófano ambulante bajo sedación y anestesia local de la zona a tratar para aplicar una cánula de radiofrecuencia bipolar de 0.9mm de diámetro y 6 cm de longitud máxima, que introducimos dentro de la zona a tratar (labios vulvares, capuchón del clítoris) con un programa de energía y temperatura acorde a cada caso, logrando una retracción adecuada de este tejido tratado.

En muchas ocasiones, los especialistas en Ginecología lo combinamos con otro dispositivo de esta plataforma de radiofrecuencia si la paciente lo necesitase, que es una radiofrecuencia fraccionada. No existen sangrados, ni secciones (cortes de la piel). En una hora está realizado todo el proceder y pasado unos 40-60 min la paciente se marcha a su casa.

¿Qué cuidados son necesarios tras la intervención?

Tras la intervención se le indica a la paciente:

• Uso de analgésicos orales (tipo paracetamol o nolotil) si lo precisase, sobre todo el día de la intervención.
• Uso de hidratantes vulvares locales diarios en la piel de la zona tratada durante 2 semanas al menos tras la ducha diaria.
• Evitará relaciones sexuales y ejercicios de impacto sobre la zona (equitación, ciclismo, spinning, etc.) tras el proceder por 3 semanas.

No necesita una baja laboral y puede llevar su vida habitual, excepto por lo recomendado anteriormente. También es necesario el control en consulta con el especialista según lo pautado al alta del proceder.