Cuando las soluciones intentadas son el problema
Escrito por:Desde el modelo de terapia breve, nos centramos en las soluciones que el consultante ha intentado para resolver su problema. La pregunta clave que surge es: ¿Qué es lo que vengo repitiendo como patrón de conducta que no permite avanzar?
Rompiendo el ciclo de repetición
La oportunidad de revisar las respuestas que he dado a los problemas que se me han presentado nos permite salir del círculo de reiterar los mismos errores. Al comprender que he construido un modelo circular de repetición de respuestas automáticas que perpetúan el problema, podemos empezar a cambiar.
Poder mirar en perspectiva desde el presente y comenzar a introducir, luego de un proceso de investigación, pequeños cambios, que sean a corto plazo, posibles y realizables, nos ayuda a tener control sobre qué respuestas puedo comenzar a dar que sean más funcionales y satisfactorias.
El cambio mínimo es una estrategia que nos permite empezar a introducir una acción pequeña y concreta. Nos preguntamos: ¿Qué tendría que suceder que nos dé una prueba tangible de que nos estamos moviendo en la dirección correcta para conseguir el cambio que queremos lograr?
El aquí y ahora
El modelo de terapia breve nos permite trabajar en el aquí y ahora. Trabajamos con la persona que está dispuesta a implementar cambios. A lo largo de las sesiones, nos enfocamos en un problema pequeño y cambiable.
Las quejas iniciales, que suelen ser muy ambiguas (como "tengo ansiedad", "no sé cómo controlar mis reacciones", "tengo problemas con mi pareja", "no tengo motivación"), se transforman en problemas específicos y concretos para trabajar y así lograr un cambio en el menor tiempo posible.
La brevedad de la terapia
La terapia breve es, en sí, breve por las cosas que no abrimos. De todas las quejas que tengo, elijo cuál es la más importante para mí en este momento de mi vida y cuál es la que más posibilidades de cambiar tengo realmente en la situación en la que me encuentro.
La terapia breve siempre comienza con la queja, identificando qué de todo lo que me está sucediendo hoy es más urgente atender, y finaliza cuando ya no hay queja. La persona que vino quejándose de algo logra verlo de una manera diferente que ya no causa problemas.
Conclusión: el poder del enfoque en la solución
La terapia breve se distingue por su enfoque práctico y directo en soluciones inmediatas. Al centrar la atención en lo que el consultante puede cambiar ahora y en cómo hacerlo, este modelo terapéutico proporciona herramientas efectivas para romper ciclos de comportamiento repetitivos y avanzar hacia un bienestar más satisfactorio.
La clave está en identificar patrones no funcionales, hacer pequeños cambios y trabajar en el aquí y ahora con problemas concretos y específicos. Ante cualquier duda, es esencial consultar con un especialista con experiencia.
