¿Cuáles son las señales tempranas que pueden sugerir la aparición de un TCA y cómo se abordan?

Escrito por: Andrea Duarte-Pires Fernández
Publicado:
Editado por: Lucía Ramírez Vilanova

Los trastornos de conducta alimentaria o TCA son enfermedades psiquiátricas complejas, multicausadas, que afectan principalmente a adolescentes y mujeres jóvenes. Son comportamientos alimentarios anormales que sostienen una preocupación excesiva por la comida, el peso y la imagen corporal. Tienen un patrón persistente de comer de manera no saludable o de hacer dietas no saludables, unido a una angustia emocional, física y social.
 

Los TCA más frecuentes incluyen la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa, el trastorno por atracón y el trastorno por evitación y restricción de la ingesta de alimentos.
 

Los TCA tienen un patrón persistente de comer de
 manera no saludable o de hacer dietas no saludables

 

¿Cuáles son los síntomas y señales de alerta que podrían indicar la presencia de un TCA?

Habitualmente los síntomas y señales más comunes, si hablamos de una anorexia nerviosa, podría ser un rechazo por mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal considerado según la edad y talla. Una percepción de la imagen corporal distorsionada (se ven “gordas” aunque la ropa le quede holgada) y presencia de amenorrea (es decir, ausencia de tres ciclos menstruales consecutivos) son otros signos frecuentes.
 

En casos de un trastorno por atracón o sobreingestas compulsivas, como podría ser también la bulimia nerviosa, los síntomas más habituales suelen ser ingestas de comida claramente superiores a las que comerían la mayoría de las personas en el mismo periodo de tiempo y bajo similares circunstancias y una sensación de pérdida de control en el momento de la ingesta (sensación de no poder parar de comer, o de no poder controlar qué ni cómo se está comiendo). También conductas como comer mucho más rápido de lo normal o hasta sentirse incómodamente lleno. Ingerir grandes cantidades de comida cuando no se tiene hambre física. Comer solo, debido a sentir vergüenza por comer demasiado y, posteriormente, sentirse enfadado con uno mismo, deprimido o muy culpable.
 

Las sobreingestas no se asocian al uso recurrente de medidas compensatorias inadecuadas (como podría ser el uso de purgas por laxantes, diuréticos o vómito autoinducido), como en la bulimia nerviosa.

 

¿Qué técnicas de intervención psicológicas se utilizan para tratar los TCA?

Los especialistas en Psicología logramos una buena intervención cuando hemos hecho una buena exploración diagnóstica y conocemos aquellos factores precipitantes, predominantes y mantenedores del trastorno que origina el motivo de consulta.

La intervención psicológica se basará en aquellas áreas de la persona que se encuentren afectadas por la enfermedad, y siempre teniendo en cuenta que los TCA tienen muchos trastornos asociados que, a menudo, dificultan su diagnóstico. 

 

En la mayoría de los casos, un TCA tiene comorbilidad con ansiedad, depresión, trastornos de conducta, trastornos de personalidad, TDA, TDAH, adicción a sustancias, TEA, y que el modo de manifestarse es a través de un trastorno alimentario. Es decir, a través de un TCA podemos descubrir patologías ocultas o menos evidentes que sostienen esa problemática alimentaria.

 

¿Qué estrategias pueden ayudar a prevenir la recaída después del tratamiento de un TCA?

Una recaída es cuando una persona en recuperación vuelve a tener comportamientos desordenados o disfuncionales en torno a la alimentación. Un proceso terapéutico de TCA es largo y complejo, y esta oscilación clínica tiene que estar asumida por el paciente como parte del proceso, no como una derrota de este.
 

Es importante que la persona conozca sus “señales de alarma” y, como modo preventivo, conocer aquellas conductas que le han llevado a recaer para poder valorar y reconducir esas dificultades que aún persisten y planificar nuevas formas de actuación.

 

¿Como abordar las creencias distorsionadas sobre la comida y el peso que contribuye a los TCA?

Las creencias distorsionadas sobre la comida, el peso y la imagen corporal son un problema evidente en los TCA. Estos pensamientos disfuncionales o irracionales afectan a cómo se siente la persona en relación con su apariencia física. Por ello, el problema no es el cuerpo, sino los pensamientos y sentimientos derivados de la imagen que tenemos de él.
 

El abordaje inicial es disminuir la influencia de estos pensamientos en torno a la propia aceptación física y corporal, o de un modelo estándar ideal que desprecia como la persona se ve a sí misma, o la comparación con aquellos que tienen la característica física que le gustaría tener, entre otros posibles abordajes.
 

Consejos para tener una relación saludable con la comida y el cuerpo

Uno de los mejores consejos sería aprender a disfrutar cada instante para sentirse plena y feliz. Una vida saludable se vincula a colmarla de momentos felices y cómo sobrellevar aquellas preocupaciones de la mejor manera, no a colmarnos de comida innecesaria. Aprender a vivir bien, conscientes en el presente, alimentarnos con atención, con la conciencia de lo que comemos.
 

Hábitos sanos y saludables como descanso suficiente y reparador cada día, preocuparnos de aquello realmente importante y que esté en nuestras manos solucionar. También es clave incorporar el deporte como un hábito a nuestra rutina, vida al aire libre y en contacto con la naturaleza, así como actividades con familia y amigos

Por Andrea Duarte-Pires Fernández
Psicología

Andrea Duarte-Pires Fernández es especialista en Psicología y Psicoterapia, con varios años de experiencia en el ámbito clínico y experta en trastornos alimenticios, trastornos del estado de ánimo como depresión y ansiedad, duelos, baja autoestima,  problemas emocionales y en trabajo con EMDR.

Se licenció en Psicología por la Universidad Abat Oliba en Barcelona y tiene un Máster en Psicología General Sanitaria, en Terapia Sistémica Familiar, en Trastornos Alimentarios y Obesidad,  además de numerosos cursos de formación relacionados con su especialidad. Asimismo, cuenta con formación en EMDR y Análisis Transaccional, dándole una mirada integrativa-humanista al marco de la terapia.

Durante este tiempo, ha desarrollado su carrera profesional en diferentes contextos de la reinserción laboral y comunitaria, centrada en especial en personas con patologías mentales graves y de curso crónico o con sufrimiento de pérdidas importantes y duelos patológicos o complicados.

En la actualidad, ejerce como psicóloga sanitaria en su consulta privada y en distintos centros médicos de Barcelona.

Ver perfil

Valoración general de sus pacientes


  • Tratamientos relacionados
  • Cambio de sexo
    Tratamiento psicológico
    Terapia de pareja
    Psicología infantil
    Neuropsicología
    Evaluación psicológica
    Histeria
    Trastornos psicóticos
    Trastornos alimenticios
    Psicofarmacología
    Este sitio web utiliza Cookies propias y de terceros para recopilar información con la finalidad de mejorar nuestros servicios, para mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, así como analizar sus hábitos de navegación. El usuario tiene la posibilidad de configurar sus preferencias AQUI.