¿Cómo podemos detectar el ojo vago en los niños?

El ojo vago o ambliopía es una patología que afecta a un 3-4% de los niños y se debe corregir durante la infancia, ya que si no se detecta a tiempo o el tratamiento no es el adecuado será muy difícil solucionarlo en el futuro. Esta patología es el motivo más frecuente de pérdida de visión en niños.

El ojo vago o ambliopía es la disminución de la agudeza visual de uno o ambos ojos sin que haya una alteración de la estructura ocular. Este defecto visual se produce cuando el niño utiliza menos uno de los dos ojos durante el periodo de desarrollo visual antes de los 8 años. Es aquí donde reside la importancia de detectarlo y tratarlo en una edad temprana. De lo contrario, el ojo vago puede continuar hasta la edad adulta, lo que puede incapacitar al paciente durante el ejercicio de diversas profesiones o en casos extremos, perdiendo la visión del ojo.

¿Cuáles son los síntomas del ojo vago en niños?

Es importante realizar las revisiones periódicas para detectar el ojo vago, además de estar atento a los síntomas que el niño puede presentar. Algunos de estos son:

• Que el niño tuerza uno o los dos ojos a partir de los 3 meses, incluso en ocasiones puntuales
• Desviar la cabeza para mirar fijamente
• Cerrar un ojo para enfocar
• Parpadear constantemente 
• Inclinar la cabeza para realizar tareas de esfuerzo visual
• Sufrir dolores de cabeza
• Guiñar los ojos y frotarlos a menudo
• Acercarse mucho a los libros al leer y al dibujar
• Quejarse de picor de ojos y enrojecimiento

¿Por qué aparece el ojo vago?

• Estrabismo
• Problemas refractivos como la miopía, hipermetropía o astigmatismo
• Enfermedades como cataratas congénitas, caída del párpado…

Tratamiento del ojo vago

Las revisiones rutinarias del pediatra y las revisiones oftalmológicas infantiles antes de los 3 años son importantes para detectar el ojo vago (hay algunos casos en los que los niños están completamente asintomáticos). Cuanto antes se diagnostique, antes de los 6 o 7 años, más posibilidades de recuperar la visión. A partir de los 3 años de edad, el niño ya puede hablar con el oftalmólogo para realizar una revisión completa, por lo que va a ayudar a diagnosticar un ojo vago con un tratamiento más efectivo que con una edad superior. El tratamiento del ojo vago dependerá de la causa, algunos tratamientos incluyen:

• Uso de parches oclusivos que obligarán a trabajar al ojo vago
• Uso de colirios de atropina que dilatan la pupila con el mismo fin que el parche, conseguir que el ojo vago trabaje
• El empleo de gafas con filtros penalizadores sobre el cristal