¿Qué es el liquen escleroatrófico?
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El liquen escleroatrófico es una enfermedad de la piel que se caracteriza por la aparición de manchas blanquecinas (pápulas o placas de atrofia e induración) habitualmente en la región anal y genital. En las mujeres suele afectar a los labios menores, labios mayores, clítoris y a la entrada de la vagina (introito vaginal).
Puede llegar hasta el área perianal, pero nunca afecta a vagina.
¿Cuáles son los síntomas?
La sintomatología más frecuente es el escozor, picor intenso o incluso dolor a nivel de la zona afectada. También se pueden presentar molestias al orinar o durante las relaciones sexuales y puede evolucionar a una pérdida progresiva de los labios menores y al estrechamiento de la entrada de la vagina.
Suele afectar más frecuente a mujeres entre 40 y 60 años. Es una enfermedad crónica de causa desconocida, aunque es posible que un sistema inmunitario hiperactivo o un desequilibrio hormonal incidan en el desarrollo de la enfermedad, coexiste con otras enfermedades autoinmunes en un 34% de los casos.
En un pequeño porcentaje de casos las lesiones pueden degenerar neoplasia intraepitelial o a un carcinoma escamoso, por lo que es importante su seguimiento.
¿Cómo se diagnostica la enfermedad?
El diagnóstico se realiza principalmente por la clínica mediante una correcta anamnesis, la exploración de los genitales externos minuciosa y dirigida. En ocasiones se precisa la biopsia para poder realizar un correcto diagnóstico diferencial y descartar la malignidad.
¿Qué tratamientos existen actualmente?
No existe un tratamiento absolutamente eficaz. Los glucocorticoides tópicos potentes han demostrado aliviar los síntomas y mejorar la evolución de la enfermedad. También algunos fármacos inmunosupresores como el Tracolimus de uso tópico tienen una buena respuesta.
Otros tratamientos como cremas con estrógenos y testosterona, hidrocloroqunina o el uso de emolientes y sustitutos del jabón, como tratamiento de base, pueden ser utilizados en los periodos sin tratamiento, pudiendo mejorar el bienestar del paciente.
En la actualidad, se está realizando tratamiento con láser obteniendo resultados preliminares esperanzadores en cuanto a la sintomatología de la paciente.
Las inyecciones con ácido hialurónico o el lipoimplante también se están ensayando, pero se precisan series más largas para ver si pueden ser unas herramientas que nos ayuden en el tratamiento de esta enfermedad.
