La otitis de baño, un problema habitual en verano

Las otitis son inflamaciones del oído, y, según qué parte del mismo esté afectada, se dividen en:
 

• Otitis externa: son las que afectan al oído externo, al conducto auditivo externo.
   
• Otitis media: son las que afectan al oído medio, donde está la cadena de huesecillos.
   
• Otitis interna: son las que afectan al oído interno, cóclea o laberinto.

La otitis de baño, la otitis externa

Las otitis denominadas de baño son en realidad las clasificadas como otitis externas, que afectan al oído externo, es decir, la parte externa al tímpano.

Este tipo de otitis se denominan como “otitis de baño” por su alta incidencia durante los meses de verano, y esto es debido a varios factores:
 

• La humedad persistente en el oído externo.
   
• Existe un acúmulo de descamación en el oído externo, que ocasionan picor.
   
• Lesión por rascado.

Estos factores hacen que la piel se reblandezca y sea fácilmente atacada por microorganismos —que habitualmente ya tenemos en la piel— lo que favorece y propicia la infección del oído externo.

¿Cuáles son los síntomas de la otitis de baño?

Los síntomas de este proceso son:
 

• Dolor intenso del oído afectado.
   
• Supuración del oído.
   
• Disminución de la audición.
   
• En casos más graves, se puede apreciar desplazamiento del pabellón auricular.

Muchos pacientes se preguntan “¿Que es mejor? ¿Playa o piscina?”. Es evidente que, en ambos casos, el problema de la humedad es común a las dos situaciones, pero, la mayor diferencia está en los componentes químicos que se añaden a las piscinas, para que sea aptas para el baño. De hecho, muchos de estos proiductos favorecen el picor y por tanto el rascado, lo que propicia la irritación de la piel del conducto auditivo. Evidentemente sin un buen tratamiento del agua se producirían problemas mayores

¿Se puede prevenir la otitis externa?

Para prevenir este problema, lo ideal es dejar secar bien la piel, para que esta sea una barrera para las infecciones.

En los casos que tengamos una otitis externa, el tratamiento incluye la limpieza del oído afectado, el uso de gotas locales y analgésicos. En los casos más severos se dará medicación vía oral.

Si desea más información, consulte con un otorrinolaringólogo.