Artroscopia y cirugía de preservación articular de rodilla: soluciones avanzadas para problemas articulares
Escrito por:La artroscopia y la cirugía de preservación articular de rodilla representan procedimientos innovadores que han revolucionado el tratamiento de lesiones y problemas en esta articulación. En España, estos métodos han cobrado relevancia en la ortopedia moderna, ofreciendo soluciones efectivas y en ocasiones menos invasivas para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
¿Qué es la artroscopia de rodilla?
La artroscopia de rodilla es un procedimiento mínimamente invasivo que emplea una pequeña cámara (artroscopio) y otros instrumentos para realizar la cirugía a través de pequeñas incisiones. El cirujano utiliza el artroscopio para inspeccionar el espacio de la articulación de la rodilla y realizar reparaciones o tratamientos con mínimos abordajes.
¿Cuáles son las condiciones que se pueden tratar con artroscopia?
La artroscopia de rodilla es eficaz para diagnosticar y tratar diversas afecciones, como:
- Desgarros de menisco.
- Lesiones del cartílago articular.
- Inflamación de la membrana sinovial.
- Reparación de ligamentos.
¿En qué consiste la cirugía de preservación de rodilla?
En esta cirugía se pretende restaurar el movimiento normal de la articulación y su funcionamiento manteniendo la rodilla original del paciente, a diferencia de la cirugía protésica. Se suele realizar sobre tres zonas anatómicas:
- Ligamentos de la rodilla: dentro de ellos, con alta frecuencia, ligamento cruzado anterior, mediante reconstrucción del mismo con injertos del propio paciente o de donante.
- Meniscos: roturas traumáticas o localizadas en zonas con capacidad reparativa, hoy en día tendemos a realizar cirugías de reparación meniscal (suturas, reinserciones). Los meniscos tienen una importante función en la rodilla, en la absorción y distribución de las cargas sobre la articulación y en la estabilidad de la misma, por lo que siempre que sea viable, se recomienda su reparación. En casos de ausencia meniscal por cirugías previas o lesiones graves no reparables, se realiza trasplante meniscal (implantación de menisco de un donante)
- Cartílago articular: es un tejido que recubre la articulación y facilita el correcto movimiento articular. Su lesión conlleva a la progresión hacia la artrosis o degeneración articular. Hoy en día, tratamos lesiones focales mediante técnicas de estimulación medular (microfracturas), sustitución del cartílago mediante trasplantes de cartílago-hueso de otras zonas (mosaicoplastia) o de donantes (aloinjertos osteocondrales), o mediante terapias regenerativas basadas en células (cultivo de células del cartílago del paciente y empleo membranas de colágeno). En casos de lesiones más extensas, que se acompañan de deformidades del eje de la extremidad (varo/valgo) realizamos osteotomías de rodilla (corte controlado en el hueso) realineamos el eje de la pierna para aliviar la presión de carga sobre la parte dañada y transferir esa carga sobre la parte sana de la rodilla.
¿Cuándo se recomienda la cirugía de preservación articular de la rodilla?
En los últimos años, las técnicas de preservación articular han permitido a las personas posponer la cirugía de prótesis de rodilla. En general, se realizan en pacientes que tienen áreas localizadas de patología, que condicionan limitación articular o en aquellos casos en los que la cirugía de prótesis de rodilla puede no estar indicada debido a su edad o nivel de actividad.
¿Cuáles son los beneficios de estos procedimientos?
Aunque la cirugía de reemplazo de rodilla tiene una alta tasa de éxito, actualmente no puede reproducir completamente la mecánica de la rodilla natural. A menudo, pacientes intervenidos de prótesis de rodilla, no pueden realizar actividades dinámicas, como saltar y en algunos casos, correr.
En la cirugía de preservación articular, al mantener los tejidos de la rodilla, puede beneficiarse de su mecánica natural y obtener una mejor función.
En muchas ocasiones se realiza a través de una técnica artroscópica, que permite:
- Procedimiento menos invasivo: mediante incisiones pequeñas, lo que conlleva menos daño tisular y, en muchos casos, una recuperación más rápida.
- Precisión y efectividad: la capacidad de visualización directa en la artroscopia permite llevar a cabo una reconstrucción más anatómica de los elementos dañados lo que contribuye a mejorar los resultados.
- Rehabilitación mejorada: la recuperación postoperatoria puede ser más rápida y eficaz, con programas de rehabilitación adaptados a las necesidades individuales de cada paciente que influyen en los resultados.
En la actualidad, la combinación de la artroscopia con técnicas de preservación articular de rodilla representa un avance significativo en el tratamiento de problemas articulares. Se están convirtiendo en un tratamiento cada vez más popular para prevenir o retrasar la aparición de la osteoartritis, especialmente en pacientes más jóvenes.