Afrontando el estrés laboral: causas, síntomas y estrategias para un equilibrio saludable

El estrés laboral es un fenómeno cada vez más frecuente en el ámbito laboral actual en España. Con el aumento de la exigencia laboral y la creciente presión por conseguir objetivos cada vez más altos, muchos trabajadores se enfrentan a una serie de desafíos psicológicos que pueden provocar saturación física y mental, afectando su bienestar y repercutiendo en otros aspectos de su vida. En este artículo, la especialista en Psicología Sara Benlloch explica las causas más comunes del estrés laboral, identifica los síntomas clave y proporciona algunas estrategias para afrontarlo.

 

Causas del estrés laboral

El estrés laboral puede tener diversas raíces, y es importante reconocer las circunstancias que pueden contribuir a su aparición. Algunas de las causas más comunes incluyen:

• Malas relaciones laborales, que pueden llegar incluso al mobbing (acoso laboral).
• Alto grado de compromiso laboral y presión por el rendimiento.
• Precariedad en las condiciones laborales físicas, como la falta de iluminación, temperaturas extremas o espacios de trabajo poco adecuados.
• Precariedad en la retribución económica del trabajo o sensación de falta de reconocimiento.
• Inseguridad laboral, con contratos precarios o bajo incertidumbre de mantener el empleo.
• Limitadas oportunidades de promoción y desarrollo profesional.
• Jornadas laborales prolongadas con horarios difíciles o mayor carga horaria de la estipulada.
• Volumen excesivo de tareas o labores monótonas y aburridas. 
• Ambigüedad en el rol laboral, donde el trabajador no tiene claridad sobre las expectativas.
• Desorden y sobrecarga laborales, a causa de una mala planificación de tareas y horarios.

Estos factores pueden combinarse y aumentar el riesgo de desarrollar estrés laboral, lo que afecta negativamente el rendimiento y la productividad de los trabajadores.
 

¿Cuáles son los síntomas?

Identificar los signos del estrés laboral es crucial para abordar este problema a tiempo e impedir que se desarrolle hasta su máxima expresión, el Síndrome del trabajador quemado (Burnout), caracterizado por un agotamiento mental y físico extremos en la persona. Algunos síntomas comunes a tener en cuenta son:

• Irritabilidad exagerada o ira sin motivo aparente.
• Desgana hacia el trabajo.
• Sensación de tristeza persistente o depresión.
• Apatía y falta de interés en actividades antes placenteras.
• Falta de confianza en las capacidades propias o baja autoestima. 
• Alteraciones del sueño, como insomnio. 
• Problemas digestivos, como dolor de estómago o trastornos gastrointestinales.
• Dolor o tensión muscular. 
• Disminución del rendimiento laboral y dificultad para concentrarse.

En general, las personas que experimentan estrés laboral pueden mostrar cambios significativos en su comportamiento, motivación y actitud hacia los demás.
 

Afrontando el estrés laboral

Ante cualquiera de las señales listadas anteriormente, es importante buscar apoyo y tomar medidas para evitar que la situación empeore. A continuación, la psicóloga Benlloch presenta hay algunas estrategias para afrontar el estrés laboral:

1. Buscar el apoyo de amigos, familiares o colegas de confianza con quienes se pueda compartir preocupaciones y emociones resulta beneficioso para afrontar el estrés laboral.
2. Establecer límites claros entre la vida laboral y personal es importante. Priorizar el tiempo para descansar, relajarse y disfrutar de actividades placenteras contribuye a mantener un equilibrio saludable.
3. Aprender a establecer límites saludables también implica saber decir "no" cuando la carga de trabajo es excesiva. Además, es importante aprender a delegar y compartir responsabilidades siempre que sea posible.
4. Mejorar la gestión del tiempo y establecer metas realistas ayuda a evitar la sensación de pesadumbre vinculada a un exceso de responsabilidades. Organizar tareas y prioridades resulta clave en este proceso.
5. Incorporar actividades de cuidado personal en la rutina diaria, como el ejercicio físico regular, una alimentación saludable y tiempo para el descanso y la relajación, favorece el bienestar general y ayuda a hacer frente al estrés laboral.
6. En caso de que el estrés laboral persista y afecte significativamente al bienestar, se puede considerar buscar el apoyo de un profesional de la salud mental especializado en el manejo del estrés y la ansiedad laboral.