¿Por qué se realiza?
La mesoterapia capilar se emplea para tratar los problemas capilares y la caída del cabello. En concreto, se emplea para mejorar el estado del cabello y es idónea para personas que sufren primeros signos de calvicie, que tienen cabello debilitado y que ven cómo éste pierde fuerza y pasa a ser menos abundante.
¿En qué consiste?
La eficacia de la mesoterapia capilar reside en su capacidad para la liberación progresiva de las sustancias y medicamentos, que se aplican inyectados de manera intradérmica (a menos de 4mm de la superficie de la piel) y de los medicamentos en sí mismos. En el caso de la aplicación para patologías capilares, la mesoterapia que se utiliza contiene micronutrientes (aminoácidos, vitaminas y minerales), así como factores de crecimiento sintéticos muy similares a los humanos.
Los resultados dependerán de la patología a tratar. Así, siempre será más efectiva en problemas agudos o en estados iniciales que no en procesos crónicos o avanzados. Sin embargo, es importante un diagnóstico previo. Así, la mesoterapia capilar puede emplearse como tratamiento único o en combinación con otras soluciones. En la caída de cabello suele aplicarse como coadyuvante pero en casos más agudos juega un papel más protagonista, por lo que el diagnóstico previo es esencial. En alopecias iniciales la mesoterapia capilar puede tener efectos similares a la bioestimulación capilar (que emplea las propiedades regenerativas de las plaquetas), produciendo una estimulación de los folículos pilosos que se encuentran en fase de reposo, propiciando que entren en fase de actividad o crecimiento y que mejoren su calidad (siendo más fuertes y resistentes) los que están en fase activa.
La mesoterapia tiene un efecto directo sobre la mejora del estado capilar. Los resultados a largo plazo están condicionados por la patología que se esté tratando. Así, en casos agudos post-traumáticos con pérdidas intensas de cabello puede tratarse y recuperarse fácilmente. Cuando son patologías crónicas y se ha obtenido un resultado satisfactorio, se pueden plantear tratamientos semestrales o anuales, para repetir el tratamiento. Asimismo, otro caso donde se ha demostrado eficaz es en casos de pacientes con microinjerto o trasplante capilar, donde pueden aplicarse sesiones anuales. Preparación para la mesoterapia capilar Antes de realizar la mesoterapia capilar es conveniente que el paciente se haga un estudio en un centro especializado en tratamientos capilares. Así, podrán estudiar cuál es el mejor tratamiento en cada caso y ver posibles contraindicaciones. Entre otros parámetros se estudiarán posibles enfermedades de la piel o del cuero cabelludo, diabetes, hemofilia u otras patologías.
Cuidados tras la intervención
En general no es una técnica que provoque efectos secundarios graves, pero es posible que el paciente, tras la sesión, note algo de dolor o una leve inflamación. En tal caso, se recomendará una crema antiinflamatoria para reducir los síntomas. Asimismo, tras la mesoterapia capilar conviene cuidar el cabello y seguir hábitos de vida saludables que sigan favoreciendo el crecimiento, evitando su caída excesiva. También es importante que el paciente tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Seguir una dieta equilibrada con los nutrientes esenciales para mantener el cabello fuerte y sano: hierro, antioxidantes, ácido fólico y vitaminas A, B, C y E.
- Reducir el estrés, ya que es uno de los responsables de la caída excesiva del cabello.
- Mantenerse bien hidratado, para que el cuero cabelludo tampoco se deshidrate.
- Cuidar el cabello con productos adecuados, hidratarlo con mascarillas nutritivas, cepillarlo bien, evitar el uso de agua demasiado caliente al lavarlo, limitar el uso de secadores y planchas y cortarlo cada tres meses.