Video del Dr. Pablo Moreno Llorente
En el inicio el hipertiroidismo tiene que tratarse intentando controlar los síntomas. Para ello utilizamos básicamente los antitiroideos: tirodril, típicamente, el metamizol. En fin, hay una serie de medicamentos que el objetivo fundamental consiste en bloquear la secreción y la excreción de hormona tiroidea al torrente sanguíneo, que son los que producen los síntomas. Otra cosa es que la enfermedad del hipertiroidismo, la más frecuente que Graves-Basedow, cursa en brotes, con lo cual pueden pasar dos cosas: que el paciente empeore a pesar del tratamiento o que después de un tratamiento prolongado, entre uno y dos años, el paciente vuelva a tener otro brote. Es entonces cuando indicamos el tratamiento definitivo, que consiste en utilizar el iodo radioactivo o la cirugía.
Bueno, el tratamiento definitivo del tiroides pasa por 2 opciones, o la del radio-iodo o la cirugía. En nuestro medio la gran mayoría de los pacientes tienen indicado hacer radio-iodo, y el único inconveniente que tiene es que es un tratamiento que genera un hipotiroidismo lento y progresivo y que requiere más controles y tiempo y es más largo para estabilizarse. Por otra parte la cirugía es el tratamiento más efectivo, el que inicialmente controla la enfermedad desde el día uno, asumimos unos riesgos quirúrgicos y está indicado fundamentalmente para una pequeña parte de los pacientes, un 7% aproximadamente y básicamente son aquellos pacientes con tiroides muy grandes, con nódulos en los que hay que descartar la presencia de cáncer, en aquellos pacientes con oftalmopatía que empeora con el radio-iodo y también en aquellos pacientes que quieren tener descendencia o tienen deseo de fertilidad y esta se retrasaría por el uso del iodo radioactivo.
Una vez tratado nuestro paciente y llegado a la fase de curación la vida será estrictamente normal. Con una dosis substitutoria para mantener una función tiroidea normal. Lo que pasa es que para llegar aquí hay 2 caminos, uno mucho más lento que es si hacemos radio-iodo, que requiere más seguimientos, el ir haciendo analíticas de control y aumentando la dosis de hormona tiroidea hasta que encontremos una dosis fija que sea la de mantenimiento, mientras que llegar a los niveles de curación con cirugía son mucho más rápidos, el paciente, una vez quitado el tiroides, se hace una tiroidectomía total, se busca la dosis necesaria para mantener una función tiroidea normal y de manera rápida y resolutiva vuelve a una vida normal.
El Dr. Pablo Moreno, especialista en Cirugía Endocrina, ofrece los detalles sobre el funcionamiento y patologías de la glándula tiroides, vital para el desarrollo y funcionamiento de nuestro organismo.
El Dr. Moreno, especialista en Cirugía Endocrina, ofrece en esta entrevista los detalles sobre la glándula tiroides y las disfunciones que puede sufrir. También explica cómo es posible vivir sin tiroides con el tratamiento hormonal sustitutivo, que permite suplir la función de la glándula tras haber pasado por una tiroidectomía o hemitiroidectomía.
¿Qué es el hipertiroidismo? ¿Cuáles son sus causas? Conoce las respuestas de la mano del Dr. Moreno Llorente, especialista en Endocrinología.
El hipertiroidismo es la situación clínica que ocurre como consecuencia de una expo-sición a niveles altos de hormona tiroidea. Las causas más importantes, más frecuentes, de hipertiroidismo son la enfermedad de Graves Basedow, que es una enfermedad autoinmune y que es responsable del hipertiroidismo en más del 80% de los casos. En segundo lugar encontramos el bocio multinodular tóxico que causa aproximadamente entre el 10 y el 20% de todos los casos de hipertiroidismo. Y finalmente tenemos el nódulo tóxico solitario que ocurre entre el 2 y el 10% de los casos.
Los síntomas más frecuentes del hipertiroidismo son el nerviosismo, la sudoración, la intolerancia al calor, el paciente refiere pérdida de peso y aumento de apetito y luego hay otros síntomas que están asociados a la enfermedad que lo produce, concreta-mente en el hipertiroidismo por enfermedad de Graves Basedow, que es la causa más frecuente de hipertiroidismo, hay una triada sintomática que se caracteriza por hipertiroidismo, que acabamos de definir los síntomas, bocio difuso y en tercer lugar oftalmopatía. El bocio difuso es el aumento del tamaño de la glándula del tiroides lo cual puede producir un aumento del perímetro cervical y la oftalmopatía es simplemente la sensación que tenemos objetiva y a veces subjetiva de que el globo ocular está protuyendo por fuera de la órbita, genera una mirada muy típica y es un síntoma practicamente diagnóstico de hipertiroidismo.