¿Cómo podemos definir el miedo?

El miedo se trata de una emoción que principalmente se caracteriza por una sensación muy intensa y generalmente desagradable que se produce por la percepción de un peligro; real o supuesto, presente, fututo o pasado. El miedo es una emoción primaria, derivada de la repulsión natural a lo que consideramos una amenaza o un riesgo. El miedo está presente en todos los animales, por lo que también se incluye a los seres humanos.

¿Qué tipos de miedo existen?

Existen distintos aspectos o circunstancias de la vida (situaciones, ideas, animales, objetos, otras personas…) que producen miedo en un buen número de personas. Las fobias o miedos más habituales son las siguientes:

• Miedo a las arañas (Arachnophobia).
• Miedo a determinadas situaciones sociales (fobia social).
• Miedo a volar (Aviatophobia).
• Miedo a los espacios abiertos (agorafobia).
• Miedo a los espacios lindados (claustrofobia).

No obstante, existen muchísimos tipos más de miedo: oscuridad, altura, muerte…

Originalmente, el miedo proviene de un peligro real y que está causado por una situación específica. En el caso de la ansiedad, la amenaza es fruto de nuestra imaginación. Se puede considerar la ansiedad como un miedo sin objeto o sin fundamento, aunque también se podría decir que es un miedo con objeto interno, ya que el peligro no se encuentra fuera, sino en nuestra mente.

¿Cuáles son las causas del miedo?

Existe un gran número de situaciones que pueden producir miedo en una persona. Por ejemplo, se puede sentir miedo en momentos en los que consideramos que nos encontramos en peligro, como por ejemplo ante un atraco. No obstante, el mismo miedo se puede sentir ante una perspectiva de un hecho, como por ejemplo cuando se camina por un callejón oscuro y sin gente por la noche.

En circunstancias normales, no hay nada que produzca miedo mientras caminas en la oscuridad, pero en nuestra mente se genera una perspectiva de todos aquellos problemas que podrían suceder.

¿Cuál es la función tiene el miedo en nuestra vida?

Normalmente, se describe o define el miedo como una emoción negativa y una sensación a evitar y que se relaciona directamente con la tristeza o la infelicidad. No obstante, debe mencionarse que el miedo se trata de una emoción existente en todas las culturas y que tiene una función adaptativa.

El miedo también nos ayuda a regular cómo de grandes deben ser nuestros pasos en cada momento... como una especie de madre prudente, pero puede ser desadaptativo si imaginamos peligros no reales que nos paralizan.

¿Cómo se afronta el miedo?

La psicoterapia está fundamentada en hacer frente al peligro o a la amenaza imaginaria. Ante una situación de peligro real, tenemos dos opciones: hacerle frente y luchar o huir. Sin embargo, ante un peligro imaginario, como este no existe, no podemos ni luchar ni huir, sino afrontarlo. Si una situación determinada nos da miedo, debemos afrontarla y no evitarla, ya que la evitación genera problemas, y la única manera de resolverlos es afrontarlos, sea de forma real o de manera imaginaria.

Para hacerle frente y enfrentarse a los miedos lo mejor es dejar que sean los pensamientos positivos los que dominen la situación. Si los pensamientos están relacionados con el miedo, solo provocarán todavía más miedo, por lo que debes dejarlos atrás.

A modo de conclusión, mejor entrenar tu mente para ver y esperar lo mejor que esperar siempre que suceda lo peor. Si desea más información sobre el miedo o sobre como afrontarlo, consulte con un especialista en Psicología.