Tendinopatía isquiotibial
¿Qué es la tendinopatía isquiotibial?
La tendinopatía isquiotibial es una lesión que afecta a los tendones de los músculos isquiotibiales, situados en la parte posterior del muslo.
Se produce por el uso excesivo, microtraumatismos repetitivos o una mala biomecánica, lo que provoca inflamación, degeneración y dolor en la zona afectada.
Síntomas de la tendinopatía isquiotibial
Los síntomas pueden variar en intensidad según la gravedad de la afección, pero los más comunes incluyen:
- Dolor en la parte posterior del muslo o en la zona glútea, que puede aumentar con la actividad física.
- Rigidez o sensación de debilidad en la pierna afectada.
- Molestias al estar sentado durante largos períodos.
- Sensación de chasquidos o bloqueos musculares en movimientos específicos.
Causas de la tendinopatía isquiotibial
Existen diversos factores que pueden contribuir al desarrollo de esta afección:
- Sobrecarga muscular: frecuente en corredores, ciclistas y futbolistas.
- Mala técnica deportiva: movimientos inadecuados o cambios bruscos de ritmo.
- Debilidad muscular: especialmente en el core y en los músculos estabilizadores de la cadera.
- Falta de flexibilidad: acortamiento muscular que aumenta la tensión sobre los tendones.
- Factores biomecánicos: dismetrías en las piernas, alteraciones en la pisada o problemas en la alineación pélvica.
- Envejecimiento y degeneración tendinosa: con el tiempo, los tendones pierden elasticidad y capacidad regenerativa.
Pronóstico de la enfermedad
El pronóstico de la tendinopatía isquiotibial depende de la precocidad del diagnóstico y la adhesión al tratamiento. En casos leves a moderados, una correcta rehabilitación permite la recuperación total en unas semanas o meses.
Sin embargo, si la lesión no se trata adecuadamente, puede cronificarse y afectar significativamente la movilidad y el rendimiento físico.
Pruebas diagnósticas
El diagnóstico de la tendinopatía isquiotibial se basa en la historia clínica y la exploración física.
Además, pueden utilizarse pruebas de imagen para confirmar la lesión y evaluar su gravedad:
- Ecografía musculoesquelética: permite visualizar el estado de los tendones y detectar inflamación o degeneración.
- Resonancia magnética: útil en casos avanzados o cuando se sospechan lesiones asociadas.
- Radiografía: aunque no muestra los tendones, puede ayudar a descartar otras patologías óseas.
¿Se puede prevenir?
Existen diversas estrategias para reducir el riesgo de desarrollar esta afección:
- Calentamiento adecuado antes de la actividad física.
- Ejercicios de fortalecimiento y estabilización de los músculos isquiotibiales, glúteos y core.
- Estiramientos regulares para mejorar la flexibilidad y reducir la tensión en los tendones.
- Uso de calzado adecuado que garantice una correcta biomecánica del pie y la pierna.
- Evitar sobrecargas o aumentos bruscos en la intensidad del entrenamiento.
- Corregir desequilibrios musculares con la ayuda de un fisioterapeuta o preparador físico.
Tratamientos para la tendinopatía isquiotibial
El tratamiento de la tendinopatía isquiotibial puede incluir distintas opciones según la severidad del cuadro:
Tratamiento conservador
- Reposo relativo: reducir la actividad que provoca dolor sin detener completamente el movimiento.
- Fisioterapia: incluye terapia manual, ejercicios excéntricos y técnicas de liberación miofascial.
- Ondas de choque: estimulan la regeneración del tendón en casos crónicos.
- Electroterapia y ultrasonidos: ayudan a reducir la inflamación y el dolor.
- Crioterapia y antiinflamatorios: para aliviar las molestias en fases agudas.
Tratamiento médico
- Infiltraciones de plasma rico en plaquetas (PRP): favorecen la recuperación del tendón.
- Infiltraciones de corticoides: solo en casos específicos y bajo supervisión médica.
Tratamiento quirúrgico
Cuando las medidas conservadoras no son efectivas, se puede considerar la cirugía para reparar el tendón afectado. Esta opción se reserva para casos graves o resistentes al tratamiento.
¿Qué especialista trata la tendinopatía isquiotibial?
El tratamiento de la tendinopatía isquiotibial requiere un enfoque multidisciplinar, en el que pueden intervenir:
- Traumatólogos: especializados en lesiones musculoesqueléticas.
- Fisioterapeutas: encargados de la rehabilitación y recuperación funcional.
- Médicos del deporte: asesoran sobre la prevención y adaptación del entrenamiento.