Prótesis de superficie

Creado: 29/11/2013
Editado: 20/10/2023

¿Qué es la prótesis de superficie?

Las prótesis de superficie están indicadas para colocar en zonas como la cadera o la rodilla, que son las articulaciones más propensas al desgaste, y son más apropiadas para pacientes de menos de 65 años.

Su característica principal es que permiten conservar gran cantidad de hueso, y suelen durar más que las prótesis convencionales. De hecho, se trata actualmente del tipo de prótesis más utilizada en rodilla y cadera.

 

¿Por qué se realiza?

Con el paso del tiempo, las articulaciones se desgastan y provocan dolor y rigidez, hasta el punto de dificultar las actividades habituales como correr, caminar o sentarse, afectando notablemente la calidad de vida. La solución más eficaz en estos casos es implantar una prótesis en la articulación.

Concretamente, las prótesis de superficie se realizan en pacientes menores de 65 años, con buena calidad de hueso y que quieran practicar ejercicio. Las principales ventajas de este tipo de prótesis son:

  • Evitan el desgaste y permiten una mayor conservación de los huesos.
  • Reducen notablemente las luxaciones.
  • Son las que más hueso conservan.

 

Está indicada para pacientes menores
de 65 años que quieren practicar ejercicio

 

¿En qué consiste?

La implantación de una prótesis de superficie se realiza mediante cirugía, al igual que con las prótesis convencionales.

Dicha implantación puede realizarse mediante diversas técnicas quirúrgicas, como la cirugía abierta o la artroscopia, en función de cada caso.

Normalmente se realizará bajo anestesia general.

Algunos especialistas de la Traumatología y Cirugía Ortopédica han observado que la cirugía para implantar la prótesis de superficie es algo más laboriosa que la de prótesis convencionales.

 

Preparación para la prótesis de superficie

Semanas antes de la intervención, el cirujano puede prescribir análisis clínicos o realizar una exploración física para descartar problemas de salud que puedan suponer un riesgo importante en la intervención, como la diabetes o la hipertensión.

Asimismo, el paciente deberá informar de todos los medicamentos que toma y debería dejar de fumar un tiempo antes de la operación, para asegurar la mejor asimilación y resultado. También debería evitar en la medida de lo posible los medicamentos antiinflamatorios.

Por último, el día de la intervención el paciente no podrá comer ni beber nada por la anestesia general, aunque todos estos aspectos los prescribirá el especialista en cada caso.

 

Cuidados tras la intervención

El postoperatorio por una prótesis de superficie es similar al de la prótesis convencional, aunque el riego de transfusión es más bajo. Así, el ingreso hospitalario será normalmente de dos a cuatro días.

Tras recibir el alta hospitalaria, el paciente requerirá de muletas o bastones para caminar durante dos a cuatro semanas.

 

Alternativas a este tratamiento

La alternativa a la prótesis de superficie es una prótesis convencional.

Para el desgaste de huesos y articulaciones, el paciente puede recurrir a las infiltraciones o a tratamientos de ozonoterapia para reducir el dolor, aunque por lo general, llegado el momento de requerir una prótesis, el paciente no tiene otra alternativa que le permita seguir con sus actividad normal.