Microcirugía del hueso temporal
¿Qué es la microcirugía del hueso temporal?
La microcirugía del hueso temporal es una intervención que se realiza en el hueso parietal del cráneo, que constituye una parte importante de la pared lateral y base craneal. Se compone de cinco porciones: escamosa, mastoidea, petrosa, timpánica y apófisis estiloides Las funciones del hueso temporal son:
- Proteger el encéfalo y los órganos auditivos.
- Proporcionar parte de las superficies articulares para la articulación temporomandibular.
- Forma parte de la región temporal y de la fosa temporal.
Al contener el hueso temporal varias cavidades y recesos relacionados con el oído (como la cavidad timpánica y la trompa de Eustaquio), es un hueso que guarda relación en varias patologías del oído, como el tinnitus o pitidos en los oídos (acúfenos), incluso en mareos y Síndrome de Mèniere.
¿Por qué se realiza?
La microcirugía del hueso temporal puede ser necesaria debido a patologías del oído o a un traumatismo en el hueso temporal. De hecho, las fracturas son las lesiones más frecuentes. Si la fractura no se visualiza correctamente algunos signos indirectos pueden hacer aumentar la sospecha: ocupación de partes blandas en celdas mastoideas o en la caja timpánica y aire en lugares no habituales. La cadena de huesecillos del oído puede lesionarse por luxaciones o por fracturas, lo que se estudiará con tomografía computerizada.
Aunque los traumatismos que afectan al cráneo son las causas más comunes de lesiones en el hueso temporal, también puede ser consecuencia de impactos directos, cuerpos extraños o heridas penetrantes. Normalmente cuando hay fractura de hueso temporal ha habido de por medio un traumatismo de alta energía, por lo que la asociación con otras fracturas de cráneo es habitual.
Habitualmente, la causa más frecuente de intervención es por afecciones infecciosas o crónicas.
¿En qué consiste?
La disección del hueso temporal es una cirugía compleja para otólogos, neuro otólogos y aquellos especialistas que se dedican a la cirugía de oído/cráneo. Es imprescindible una destreza quirúrgica y conocimientos anatómicos adecuados, para manejar las patologías que afecten al hueso de forma correcta. Así, hay diferentes procesos quirúrgicos según cuál sea el problema a abordar. Algunos son:
- Mastoidectomía simple: extirpación de las celdillas mastoideas, es decir, los espacios huecos y llenos de aire que se encuentran en el cráneo por detrás del oído. En la mayoría de casos es una afección causada por una infección en el oído y que se disemina al hueso circundante en el cráneo.
- Timpanotomía posterior: apertura del receso facial mediante mastoidectomía para comunicar el oído medio con la mastoides. Es la cirugía de las cavidades posteriores del oído. Permite el acceso directo y el tratamiento de los procesos patológicos situados en dichas cavidades, pero también permite acceder a otras cavidades, como el epitímpano y la caja del tímpano.
Las técnicas se dividen en timpanoplastia del tipo 1 al 4, siendo la primera la zona que afecta al tímpano y la de mayor grado la que afecta a mastoides y oído medio.
Preparación para la microcirugía del hueso temporal
Según cuál sea la intervención a realizar el especialista solicitará una preparación u otra. Es necesario realizar una tomografía computerizada previamente, para poder estudiar la profundidad y tipología de la lesión. Una vez diagnosticada, el especialista en Otorrinolaringología será quien estipule la preparación que debe seguir el paciente.
Cuidados tras la intervención
Tras la intervención serán necesarios ciertos cuidados. No hay que olvidar que la zona intervenida es delicada, por comprender el cráneo y una serie de huesos también frágiles, como son todos aquellos que forman las estructuras auditivas. Será el especialista en Otorrinolaringología quien recomiende el mejor postoperatorio y cuidados en cada caso.
Alternativas a este tratamiento
Continuamente se está avanzando en la búsqueda de técnicas mínimamente invasivas. El campo de la cirugía del hueso temporal no es una excepción. Es una región extremadamente delicada, con muchas terminaciones nerviosas y estructuras muy sensibles, por lo que la mínima invasión siempre será algo positivo.