Infección de orina en niños
¿Qué es la infección de orina en niños?
La infección de orina se produce por la existencia de bacterias en la orina por infección de la uretra, riñón, vejiga o la próstata.
Esta infección se suele dar a los tres años, aproximadamente, y es más frecuente en niñas. Los niños no circuncidados tienen un riesgo algo más alto de infección antes de un año de vida.
Pronóstico de la enfermedad
En la mayor parte de los casos la infección se cura siguiendo el tratamiento adecuado y se pueden prevenir las infecciones repetitivas.
Si la infección se extiende hacia los riñones (pielonefritis) puede ser más grave, sobre todo si son de forma repetitiva, ya que puede ser señal de daño crónico.
Síntomas de la infección de orina en niños
Aunque puede que no haya síntomas, algunos pueden ser falta de apetito, fiebre o vómitos.
En la mayoría de infecciones solo se ve involucrada la vejiga y los síntomas pueden ser:
- Sangre en la orina u orina turbia.
- Mala olor o fuerte olor de la orina.
- Dolor o ardor al orinar.
- Necesidad frecuente de orinar.
- Malestar.
- Presión o dolor en la parte inferior de la pelvis o espalda baja.
- Niños que pese a ya estar enseñados, mojan la cama.
Si la infección se ha diseminado a los riñones se aprecian los siguientes síntomas:
- Escalofríos.
- Fiebre.
- Vómitos y náuseas.
- Dolor lateral en el costado o la espalda.
- Fuerte dolor en la zona del abdomen.
- Piel caliente o enrojecida.
¿Cuáles son las causas de la infección de orina?
Infecciones del tracto urinario se pueden dar cuando entran bacterias en la vejiga o en los riñones. Estas bacterias son comunes en la piel alrededor del ano o cerca de la vagina.
De forma normal, no hay presencia de bacterias en las vías urinarias, pero existen diversos factores que pueden propiciar la entrada o permanencia de bacterias en el tracto urinario:
- Reflujo vesicoureteral: una patología que suele estar presente al nacer y que permite que la orina fluya de vuelta hacia los uréteres y riñones.
- Patologías del cerebro o del sistema nervioso que dificultan vaciar la vejiga.
- Baños de burbujas.
- Prendas de ropa demasiado ajustadas.
- No orinar suficiente durante el día.
- Limpiarse de forma incorrecta (niñas): si tras ir al baño se limpian de atrás, cerca del ano, hacia delante puede llevar bacterias hasta la abertura por donde sale la orina.
- Cambios o anomalías congénitas en la estructura del tracto urinario.
¿Se puede prevenir?
Algunas de las medidas que se pueden tomar para prevenir las infecciones urinarias son:
- Hacer que el niño use ropa interior y ropa holgada.
- Hacer que ingieran más líquidos.
- Evitar los baños de burbujas.
- Asegurarse que la zona genital de su hijo se mantenga limpia, así como que se limpia de adelante hacia atrás.
- Enseñar a ir al baño diversas veces al día y no aguantarse las ganas de orinar.
Tratamientos para la infección de orina
Es importante realizar un tratamiento rápido, mediante antibióticos, para proteger a los riñones del niño. Una vez detectado, el niño debe tomar mucho líquido.
El tratamiento variará según la edad del niño:
- En muchos casos los bebés más pequeños serán hospitalizados y se les administrará antibióticos mediante a través de una vena.
- En bebés mayores o niños se trataran antibióticos por vía oral.
Este tratamiento puede durar varios meses y en algunos casos, una vez terminados, puede ser necesario realizar otro examen de orinar para asegurarse de que no persistan las bacterias en las vejigas.
¿Qué especialista lo trata?
Las infecciones de orina en niños los trata un nefrólogo infantil o pediatra.