Crianza de alta demanda
¿Qué significa crianza de alta demanda?
Se conoce como crianza de alta demanda aquella cuyos infantes, desde muy temprana edad, presentan características que pueden hacer que la crianza y el cuidado sean más intensivos y desafiantes para los padres.
Algunas de las características comunes asociadas con los niños de alta demanda son: intensidad emocional, necesidades de atención constante, dificultad para calmarse y mayor sensibilidad. Los padres pueden sentirse desbordados y llegar incluso a cuestionarse si están cumpliendo con su papel como padres. Conocerlos es fundamental para aprender a tratar con ellos y cumplir como padres.
Características de los niños de alta demanda
- Intensidad emocional.
- Necesidad constante de atención.
- Dificultad para calmarse.
- Persistencia en sus necesidades.
Es importante destacar que estas características no son inherentemente negativas, y los niños/as de alta demanda pueden tener muchas cualidades positivas, como ser enérgicos, apasionados y perceptivos. Sin embargo, reconocer y entender estas características puede ayudar a los padres a abordar las necesidades específicas de sus hijos de manera efectiva y desarrollar estrategias de crianza que fomenten un entorno positivo y saludable.
Consejos para los padres con hijos de alta demanda
Busca apoyo: Conectar con otros padres que hayan pasado por situaciones similares y compartir experiencias puede ser reconfortante. Puedes unirte a grupos de apoyo o buscar comunidades en línea. Comprende las necesidades de tu hijo: Trata de comprender las señales y necesidades específicas de tu hijo/a. Aprender a reconocer sus patrones de sueño, hambre y malestar puede ayudarte a anticipar y abordar sus necesidades de manera más efectiva. Establece rutinas consistentes: Los niños de alta demanda pueden beneficiarse de rutinas predecibles. Establece horarios regulares para comidas, siestas y actividades para ayudar a tu hijo/a a sentirse más seguro y en control. Proporciona consuelo y contacto físico: Ofrece abrazos y caricias. Muchos infantes de alta demanda encuentran consuelo en el contacto físico. El tiempo de apego y el contacto piel con piel pueden fortalecer el vínculo emocional. Aprende técnicas de relajación: Tanto para ti como para tu hijo/a, aprender técnicas de relajación puede ser beneficioso. Prueba con la respiración profunda, la relajación muscular progresiva o actividades calmantes para ayudar a reducir el estrés.
Recuerda que cada niño/a es diferente, y lo que funciona para algunos puede no ser la solución para todos. La paciencia y la adaptabilidad son clave en la crianza de alta demanda.