Cirugía láser de ano

Creado: 28/06/2013
Editado: 21/09/2023

 

¿Qué es la cirugía anal con láser?

Los láseres se utilizan cada vez con más frecuencia en diversos procedimientos quirúrgicos como una opción menos invasiva. Una técnica novedosa que se puede utilizar como opción para tratar las fístulas anales es la técnica FiLaC™ (cierre con láser de fístula). Esto implica el uso de una fibra láser para sellar la fístula.

 

¿Por qué se hace?

La técnica FiLaC se utiliza para cerrar las fístulas anales, es decir, los túneles que se pueden desarrollar desde el extremo del intestino hasta la piel cerca del ano. Las fístulas anales generalmente se producen cuando un absceso anal es drenado de pus, dejando un canal vacío, aunque también pueden ser complicaciones de la enfermedad de Crohn, diverticulitis, enfermedades como tuberculosis o VIH o complicaciones de cirugía en esa área.

 

Las fístulas anales pueden causar dolor e irritación y pueden filtrar una secreción maloliente. Las personas que sufren de esta afección pueden encontrar sangre y pus en sus heces y, en algunos casos, pueden tener dificultad para controlar sus evacuaciones intestinales.

 

Esta afección desagradable puede tratarse con varias opciones quirúrgicas, que van desde cortar la fístula abierta para que cicatrice como una cicatriz (fistulotomía) hasta bloquearla con un pegamento especial o un tapón en forma de cono. Cada procedimiento tiene sus propias ventajas e inconvenientes, y hay poco consenso sobre cuál, si es que hay alguna, es la mejor opción para el paciente.

 

Las fístulas anales pueden causar dolor e irritación y pueden filtrar una secreción maloliente

 

 

La ventaja de usar un láser es que es menos invasivo y causa un daño mínimo al músculo del esfínter, reduciendo el riesgo de incontinencia después del procedimiento. Sin embargo, el riesgo de recurrencia de la fístula es mayor que en algunos de los otros tratamientos.

 

¿En qué consiste?

El cierre con láser de fístula consiste en introducir la fibra láser en la fístula desde el exterior y pasarla a través de la abertura dentro del recto. Luego, el láser se activa, haciendo que el tejido a su alrededor se contraiga a medida que las proteínas se desnaturalizan. El láser se arrastra lentamente hacia atrás a través de la fístula a una velocidad aproximada de 1 cm cada tres segundos, sellando el canal detrás de él. La abertura interna se cierra con una sutura y en algunos casos con un colgajo de piel.

 

¿Cómo prepararse para la cirugía anal con láser?

Es posible que se necesite algo de preparación antes del procedimiento de FiLaC, incluyendo un enema rectal un día antes de la operación para preparar el intestino para la cirugía y preparar la propia fístula. Esto puede implicar sondear la fístula con un catéter, limpiarla con solución salina y realizar una resección de la abertura interna, colocando el colgajo miomucoso en su lugar.

 

Cuidados posteriores

Por lo general, los pacientes permanecen en el hospital durante dos o tres días después del procedimiento, mientras que los médicos supervisan el proceso de curación. Al igual que con otros tratamientos, para las fístulas anales existe la posibilidad de que el cierre del láser de fístula falle y la fístula se vuelva a abrir, en cuyo caso el médico podría recomendar otras opciones.

 

Alternativas a este tratamiento

Los tratamientos alternativos para las fístulas anales pueden ser:

 

  • Fistulotomía: el tratamiento más común y posiblemente el más efectivo. Sin embargo, si la fístula atraviesa los músculos del esfínter anal, extirparla con una fistulotomía podría dejarlos dañados y dejar al paciente incapaz de controlar las deposiciones.
  • Técnicas de Seton: usando hilo quirúrgico para mantener la fístula abierta para dejarla drenar y estimularla para que sane por sí misma, sin la necesidad de cortar los músculos del esfínter anal.
  • Procedimientos de colgajo de avance: similar al FiLaC, pero usando herramientas quirúrgicas tradicionales para cortar o raspar la fístula en lugar con un láser. Se utiliza un colgajo de tejido tomado del recto para cerrar la abertura.
  • Tapón bioprotésico: se utiliza un tapón en forma de cono hecho de tejido animal para bloquear la abertura interna de la fístula. Actualmente, el NICE recomienda realizar este procedimiento como parte de la investigación médica, ya que se necesitan más datos sobre su efectividad.
  • Cola de fibrina: la única opción no quirúrgica, esta cola especial ayuda a sellar y curar la fístula.