Alergias alimentarias

Creado: 24/10/2013
Editado: 21/09/2023

 

¿Qué es la alergia alimentaria?

Cuando el sistema inmune del cuerpo reacciona de manera inusual a algunos alimentos específicos, se le denomina alergia alimentaria. El cuerpo produce de manera errónea un anticuerpo cuando se ha consumido un alimento específico que desencadena la alergia. Los anticuerpos empiezan un proceso que libera histamina para que el cuerpo combata lo que cree que lo está invadiendo. Averiguar qué alimentos causan los síntomas puede resultar ser más difícil para algunas personas. Las alergias alimentarias pueden tardar un tiempo en diagnosticarse.

 

¿Cuáles son los síntomas de la alergia alimentaria?

Una reacción alérgica a los alimentos puede ocurrir en cuestión de minutos, o puede ocurrir horas más tarde. Los signos más comunes de una alergia alimentaria son:

  • Hormigueo y picor en la boca.
  • Urticaria o eccemas.
  • Hinchazón: labios, cara, lengua o garganta.
  • Sibilancias y dificultad para respirar.
  • Dolor abdominal.
  • Diarrea, náuseas o vómitos.
  • Mareo.

Algunas veces los síntomas pueden poner en peligro la vida de una persona, a este tipo de reacción se le denomina anafilaxis. Si alguien es severamente alérgico a ciertos alimentos, debe recibir una dosis de epinefrina (inyección de adrenalina) lo antes posible.

Se aconseja mantener un diario alimenticio para que el médico pueda buscar cualquier alimento que lo provoca

¿Qué alimentos son los más comunes en causar una reacción alérgica?

Cualquier alimento puede causar alergias, pero los más comunes que pueden llegar a causarla son:

  • La leche.
  • Los huevos.
  • La nueces pero sobretodo los cacahuetes.
  • La soja.
  • El trigo y las semillas que contienen gluten.
  • El marisco.

 

¿Cómo se diagnostican las alergias alimentarias?

Se aconseja mantener un diario alimenticio para que el médico pueda buscar cualquier alimento que lo provoca. Una dieta de eliminación de alimentos puede ayudar a ver si la reacción desaparece. Tras una dieta de eliminación, las pruebas de provocación (o de exposición) con alimentos pueden realizarse bajo supervisión médica. El paciente puede realizar un análisis de sangre radioalergosorbente (RAST) para ver cuántos anticuerpos produce su sistema inmunitario. También existe una prueba de alergia en la piel, llamada prueba de raspado.

 

¿Cómo se tratan las alergias alimentarias?

Se recomienda mantenerse alejado de los alimentos que puedan causar la alergia alimentaria. Las alergias leves desaparecen sin necesidad de un tratamiento. Los antihistamínicos pueden ayudar a reducir algunas alergias en la piel y otros síntomas de picazón. En casos más graves, los corticosteroides pueden reducir la hinchazón. En casos más graves, una inyección de epinefrina puede revertir los síntomas.

 

¿Cómo puede una persona prepararse para una reacción alérgica a los alimentos?

Un especialista puede recomendar una dieta saludable y nutritiva que pueda funcionarte mejor. Es importante consultar las etiquetas y los ingredientes en los alimentos procesados. Si eres propenso a sufrir reacciones alérgicas, un médico te puede recetar un botiquín con inyecciones de epinefrina, que la persona debería llevar consigo en todo momento.

 

¿Cuál es la diferencia entre las alergias alimentarias y la intolerancia a los alimentos?

Las alergias e intolerancias alimentarias pueden presentar síntomas similares, pero son afecciones diferentes. Las intolerancias pueden hacer que una persona se sienta enferma, mientras que una alergia alimentaria puede hacer que alguien se sienta mal, pero también producir una reacción que puede poner en peligro su vida. Una intolerancia a los alimentos significa que el cuerpo de una persona no puede digerir el alimento que pretende comer o que el sistema digestivo se ha irritado. Los síntomas incluyen hinchazón, náuseas, gases, dolor abdominal y diarrea. Una alergia alimentaria ocurre cuando el sistema inmunitario del cuerpo ve los alimentos como un invasor, éste libera histamina y causa síntomas de reacción alérgica como problemas respiratorios, hinchazón, una disminución de la presión arterial y vómitos.