¿Qué es la cirugía podológica del pie?
La cirugía podológica del pie es una intervención quirúrgica que se encarga del tratamiento y de la corrección definitiva de enfermedades y malformaciones que aparecen en los pies.
Se trata de una cirugía que, dentro del área de la Podología, es uno de los métodos más utilizados para tratar patologías que afectan al pie, obteniendo grandes resultados.
¿Por qué se realiza la cirugía podológica del pie?
La cirugía podológica del pie tiene la finalidad de aportar soluciones definitivas a patologías o enfermedades que afectan al pie y al tobillo, pero que no han podido ser corregidas mediante el tratamiento conservador.
La cirugía podológica cubre una gama amplia de deformidades y patologías, desde cirugías más básicas hasta cirugías más complejas. De esta manera, las patologías que se tratan más frecuentemente a través de la cirugía podológica del pie son:
- Patologías más simples, como uñas encarnadas
- Patologías de origen dérmico, como papilomas o quistes
- Patologías más complejas, como hallux valgus (juanetes), dedos en garra, juanete de sastre, metatarsalgias, fascitis plantar, artrosis del pie, Neuroma de Morton, talalgias y espolón calcáneo
¿En qué consiste la cirugía podológica del pie?
La cirugía podológica del pie es una intervención quirúrgica que, en la gran mayoría de los casos, se realiza mediante anestesia local. Sin embargo, en ocasiones se realiza bajo sedación consciente, para conseguir que el paciente esté más cómodo durante la intervención.
Además, se trata de una cirugía que se lleva a cabo en régimen ambulatorio. En este sentido, la operación se realiza sin necesidad de ingreso, de manera que normalmente el paciente puede volver a casa el mismo día de la intervención.
Preparación para la cirugía podológica del pie
Antes de realizar la cirugía, es muy importante que el médico haga una evaluación al paciente y para medir el estado de la salud podológica del paciente. En función del nivel de gravedad, el especialista determinará cuál es la técnica más indicada para tratar la patología.
Una vez que se decide la técnica a realizar, el médico realiza una serie de pruebas al paciente, que incluyen radiografías, ecografías y radioscopia. De esta manera, es posible realizar el tratamiento más adecuado.
Cuidados tras la intervención
Aunque este tipo de cirugía cuenta con un postoperatorio rápido y satisfactorio, tras la cirugía podológica del pie es importante seguir una serie de pautas. Estas pautas siempre dependerán de una serie de factores como las características de cada individuo o la técnica utilizada para llevar a cabo la cirugía, ya que puede variar mucho de un individuo a otro.
Sin embargo, existen una serie de pautas básicas:
- Reposo relativo durante las 48 horas posteriores a la intervención
- No hacer grandes caminatas ni actividades físicas intensas durante los primeros 15 días
- Utilizar zapatos postquirúrgicos y abiertos durante una semana
- Tomar antiinflamatorios o analgésicos en el caso de que aparezca dolor tras la intervención