Las redes sociales cumplen una importante función de sostén y apoyo para muchas personas en la actualidad. Realizando un uso responsable de las mismas ofrecen grandes posibilidades y oportunidades que, de otro modo, no serían posibles. Laura Martín de la Plaza, especialista en Psicología, explica los efectos negativos que tienen en nuestra salud mental.
Hay una línea muy fina y fácil de traspasar para que las redes sociales se conviertan en un punto de inflexión, generando consecuencias psicológicas negativas en el ser humano. La psicóloga de Capital Psicólogos Laura Martín de la Plaza cuenta cuáles son los efectos de las redes sociales en nosotros y cómo utilizarlas sin que nos afecten negativamente.
¿Qué efectos negativos tienen las RRSS en los adolescentes?
El adolescente, poseedor de un cerebro aún en desarrollo, no dispone de las capacidades cognitivas de juicio, reflexión y autocontrol. Son impulsivos, buscando constantemente el placer y la estimulación, sabiéndose invencibles, con personalidad en desarrollo y buscando un grupo de iguales al que pertenecer. Teniendo este contexto, las horas expuestos a las redes sociales pueden marcar su personalidad y depender en exceso de los likes recibidos, contenido visualizado y comentarios al respecto.
De nuevo, trabajando en prevención y limitando moderadamente el uso de las mismas, podrán tener distancia para valorar cómo están funcionando ellos en el mundo virtual y poder alejarse de aquello que les pueda estar dañando.
¿Qué enfermedades pueden causar?
Desde el ámbito psicológico, puede darse adicción a las tecnologías, con las consecuencias que hay detrás: aislamiento, ansiedad, insomnio, irritabilidad, generando dependencia a ellas para subsistir.
Asimismo, problemas de autoestima e inferioridad, pues parecerá ser que nunca tendremos la misma felicidad que los demás muestran y habremos de hacer un esfuerzo por “estar a la altura”, creando complejos en nuestra personalidad por intentar alcanzar un yo idealizado, un avatar, no real. Por tanto, puede producir distorsiones en la personalidad (¿quién soy yo realmente?) así como inseguridades constantes, pérdida de naturalidad en el día a día y sensación de poder ser juzgado fácilmente.
¿Cómo podemos usar las RRSS sin que nos influyan negativamente?
Trabajando en la prevención y buen uso de las mismas, empezando por instruir en las escuelas a los más pequeños, así como a sus familias, para que puedan tener conciencia real sobre cómo hacer un buen uso de las mismas y siendo conocedores de cómo pueden afectar negativamente.
Sería además interesante marcar tiempos de uso de redes sociales y tecnología en general, para evitar obsesión y que sean un camino fácil para llenar momentos de aburrimiento.
Hemos de ser muy críticos con el contenido que se presenta en redes, ya que todo ello tiene intereses detrás y ha podido ser modificado. Hemos de saber que lo que hay detrás de la pantalla no sustituye a una relación presencial, donde no hay tanto control sobre lo que se quiere mostrar. En condiciones normales, tiende a ser una relación desde la naturaleza propia del ser humano.
Por último, siendo conocedores de que la información que aparece en pantallas está seleccionada en base a nuestros gustos, hemos de trabajar conscientemente en el autocontrol, tomando el poder y no al revés.
Por contra, ¿qué efectos positivos tienen en nosotros?
Existen iniciativas muy interesantes donde se hace llegar contenido divulgativo, maneras innovadoras de educar a todos los niveles y estrategias pedagógicas y creativas que son mostradas en redes sociales. Sabiendo cómo buscar, y tomando el control del uso de las mismas, las redes sociales son una ventaja en este siglo XXI.
La pregunta que plantea la psicóloga Laura Martín de la Plaza, ya sea adolescente o adulto, es: ¿realmente tenemos siempre presente el cómo hacer un buen uso para evitar caer en las trampas?
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