Técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas
El traumatólogo y miembro de Top Doctors, el Dr. Jaume Soler Subirats, coordina a un equipo de grandes expertos en la Unidad de Cirugía Mínimamente Invasiva. Licenciado con sobresaliente en la Facultad de Medicina por la Universitat de Barcelona, formó parte del equipo del Dr. Ojeda Gil en la cátedra del profesor Piulach, Clínica de La Alianza y centro municipal Perecamps. Desde hace 14 años se dedica a la técnica mínimamente invasiva (TMI).
En colaboración con el Dr. Ferran Lafuente Rodés, traumatólogo y cirujano ortopédico, exjefe de cirugía ortopédica de la Clínica Sagrado Corazón, están efectuando la TMI en prótesis de cadera, rodilla, pie, mano y columna, lo que acorta los plazos de recuperación del paciente y minimiza el dolor posoperatorio.
¿Qué ventajas ofrecen las técnicas quirúrgicas?
Las técnicas quirúrgicas mejoran la calidad de vida de los pacientes afectados de artrosis en distintas articulaciones. La colocación de prótesis en cadera, rodilla y hombro es una práctica habitual desde hace años.
En la actualidad, estas prótesis pueden realizarse con nuevas técnicas, las llamadas “técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas”, que disminuyen la lesión en músculos y ligamentos, permite una movilización precoz y reduce el dolor posoperatorio.
¿Qué zonas se pueden tratar mediante la cirugía mínimamente invasiva?
La lesión degenerativa de las manos más frecuente es la “rizartrosis del pulgar”, que al afectar el movimiento de “pinza” impide, en gran medida, las labores cotidianas de la persona afectada.
Actualmente, las prótesis del trapecio restituyen los movimientos y eliminan las deformidades de este hueso, eliminando el dolor en todos los casos y permitiendo una completa movilización.
Las deformidades del pie pueden solventarse con la cirugía percutánea, que se efectúa con anestesia local y unas incisiones puntiformes. Se realiza de forma ambulatoria, de modo que se acortan tanto el tiempo quirúrgico como la posterior recuperación.
Dichas técnicas permiten, con la utilización de un calzado especial, caminar desde el primer día. El dolor es mínimo y, por consiguiente, la necesidad de tomar calmantes es testimonial.
La técnica percutánea nos permite corregir el hallux valgus ( juanetes), dedos en martillo, sobrecarga de los metatarsianos y otras deformidades de los dedos antiestéticas y muy dolorosas. La corrección del espolón del calcáneo y la fascitis plantar también son corregidas con dicha tecnología.
Para el tratamiento de la hernia discal, se combinan múltiples disciplinas según cada caso: la utilización del ozono, orthokine (suero preparado con la propia sangre del paciente que proporciona un efecto antiinflamatorio, de reducción del dolor y protector del cartílago), discogel y radiofrecuencia pulsada como terapia mínimamente invasiva, la alternativa a la laminectomía y a la extirpación parcial del disco, que permiten que el tiempo de estancia en el hospital sea de entre 4 y 6 horas.
La cirugía mínimamente invasiva es el futuro, sino el presente, ya que permite solucionar cada vez más patologías, siempre reduciendo el dolor y acortando el posoperatorio a los pacientes.