Los trastornos del neurodesarrollo necesitan un tratamiento multimodal
En este artículo hablamos con el Dr. Fernando Mulas Delgado, especialista en Neurología Pediátrica y director médico del Instituto Valenciano de Neurología Pediátrica (INVANEP) sobre los trastornos del neurodesarrollo, sus causas y cuál es el tratamiento más eficaz para las personas que los sufren, sobre todo los más pequeños.
¿Qué son los trastornos del neurodesarrollo?
Son disfunciones del desarrollo cerebral que desde los primeros años de vida producen manifestaciones clínicas muy variables y que tienen una evidente base neurobiológica. Por ello es prioritario el diagnóstico y estudio neuropediátrico, seguido de una participación e intervención multidisciplinar y multimodal por los distintos especialistas implicados en los Trastornos del Neurodesarrollo.
¿Qué causa un trastorno del neurodesarrollo?
Hay múltiples posibles causas, pero la base genética es relevante en muchos de ellos, aunque por ser trastornos de carácter poligénico es compleja una identificación específica. En cualquier caso, procede en primer lugar un completo estudio neuropediátrico para el diagnóstico diferencial de las posibles patologías neurológicas implicadas, siendo fundamental el diagnóstico clínico apoyado por las exploraciones complementarias procedentes.
¿Cuáles son los tipos de trastornos del desarrollo?
El paradigma son los Trastornos del Espectro Autista (TEA), cuya expresividad clínica es muy variable. Por su relevancia y posibilidad de un tratamiento farmacológico específico está el Trastorno por Déficit y Atención e Hiperactividad (TDAH). Los Trastornos del aprendizaje también tienen una base neurobiológica y pueden asociarse con los anteriormente citados. El Trastorno del desarrollo intelectual es relevante por su trascendencia y repercusión en la vida de los afectados y sus familias. Otros son los Trastornos de la comunicación y los Trastornos motores.
¿Qué tipos de tratamientos existen?
El tratamiento debe ser multimodal, tanto farmacológico como cognitivo conductual. La intervención incluye el apoyo psicopedagógico, psicológico, logopédico, terapia ocupacional, etc., y depende de las manifestaciones clínicas de cada caso concreto. La importancia del diagnóstico precoz es relevante para una terapia más eficaz y un mejor pronóstico.
¿Qué pronóstico tiene un paciente con un trastorno del desarrollo?
Es muy variable. Solo la experiencia fundamentada permite hacer una mayor aproximación del pronóstico, pero la propia base genética en muchos casos lo hace aún más imprevisible. Hay que tener mucha prudencia en el pronóstico a largo plazo y en todo caso, las indicaciones terapéuticas farmacológicas y las intervenciones específicas deben enfatizarse para actuar de inmediato, lo que permite un mejor pronóstico evolutivo, pues los resultados pueden ser muy favorables con una intervención temprana.
¿Cómo es la transición a la edad adulta?
Por una parte, es complicada porque los especialistas en adultos reciben patologías complejas a las que no están habituados, y las intervenciones al ser multimodales no siempre encuentran la continuidad apropiada para cada caso. La integración en el ámbito de la vida diaria y social puede ser ardua, por eso se precisan los mayores esfuerzos para adaptar cada caso concreto a sus necesidades en el ámbito cultural, laboral, sexual, social, etc.