Lifting facial

El lifting facial es una intervención quirúrgica que permite corregir el envejecimiento y el rictus facial. Se trata de una técnica de cirugía plástica que ayuda mucho a mejorar el aspecto facial de los pacientes, devolviendo el tono cutáneo y recuperando los tonos de luz. El lifting facial se puede realizar con dos tipos de anestesia: local y general, y podemos distinguir entre distintas técnicas quirúrgicas: vectorial, de dos tercios inferiores, de un tercio superior, temporal, o mediante lipolifting, entre otras.

Con el lifting podemos corregir prácticamente todas las zonas de la cara, desde el cuello hasta la frente, pasando por los párpados. El procedimiento se podría resumir en la recolocación del SMAS, el estiramiento de la piel, y por último, la sutura de las incisiones.

La operación se aconseja o no, dependiendo del estado del paciente, aunque con las técnicas complementarias de rellenos de ácido hialurónico, botox o lipolifting parece que se retrasa la edad para esta cirugía. Sin embargo, en muchas ocasiones, pacientes entre 30-40 años requieren de nuestros servicios para este tratamiento.

Las cicatrices tras un lifting facial apenas son visibles, o bien son tapadas por el cabello o se encuentran en zonas escondidas. La cicatrización en la cara suele ser muy buena, en este sentido, el paciente no tiene nada que temer.