Implantología dental: restaurando sonrisas con tecnología avanzada

En la actualidad, la implantología dental se ha convertido en una solución innovadora y efectiva para restaurar sonrisas y mejorar la calidad de vida de numerosos pacientes en España. En este artículo, el Dr. Dulanto Cantabrana, especialista en Odontología, explica en detalle qué es la implantología dental, cómo se lleva a cabo el procedimiento y qué beneficios ofrece a aquellos que necesitan reemplazar dientes perdidos o dañados.

 

¿Qué es la implantología dental?

La implantología dental es una rama de la odontología que se centra en la colocación de implantes dentales, es decir, raíces artificiales de titanio, en el hueso maxilar o mandibular. Estos implantes actúan como una base sólida para sustituir los dientes naturales que se han perdido debido a diversas circunstancias.

Los implantes dentales son diseñados para imitar la estructura y función de los dientes naturales, y se integran de forma segura en el hueso de la mandíbula o el maxilar. Una vez colocados, se les puede añadir una corona dental, una prótesis parcial o incluso una prótesis completa, según las necesidades individuales del paciente.
 

¿Qué tipos existen?

Existen diferentes tipos de implantes dentales, diseñados para adaptarse a las necesidades individuales de los pacientes. La elección del tipo de implante dental depende de factores como la cantidad y calidad del hueso disponible, la ubicación del implante y las necesidades individuales del paciente. Los odontólogos especializados en implantología dental como el Dr. Dulanto Cantabrana evalúan cuidadosamente cada caso y recomiendan el tipo de implante más adecuado para lograr los mejores resultados.

A continuación, se presentan algunos de los tipos más comunes de implantes dentales:

• Implantes endoóseos. Estos son los implantes dentales más comunes y se colocan directamente en el hueso maxilar o mandibular. Su forma es generalmente cilíndrica o cónica y ofrecen una base sólida y estable para soportar prótesis dentales individuales, puentes o dentaduras completas.
• Implantes cigomáticos. Los implantes cigomáticos son utilizados en casos en los que el hueso maxilar es insuficiente para la colocación de implantes endoóseos. En lugar de fijarse en el maxilar, se anclan en el hueso cigomático, que es una estructura ósea ubicada en la mejilla. Estos implantes proporcionan una alternativa viable para pacientes que han experimentado una pérdida ósea significativa en el área del maxilar.
• Implantes pterigoideos. Este tipo de implantes se utiliza en situaciones en las que el hueso posterior del maxilar es insuficiente para la colocación de implantes endoóseos. Estos implantes se insertan en el hueso pterigoideo, que se encuentra cerca del maxilar superior. Los implantes pterigoideos ofrecen una solución eficaz para pacientes con una altura ósea limitada en la región posterior del maxilar.
• Implantes subperiósticos. Estos se colocan debajo del tejido gingival, pero por encima del hueso maxilar o mandibular. Consisten en un marco metálico personalizado que se adapta a la forma del maxilar o la mandíbula del paciente.
   

¿Cuáles son las causas comunes para necesitar un implante?

La necesidad de un implante dental puede surgir por diversas circunstancias que afectan a la salud bucal de la persona. A continuación, se presentan algunas de las causas más comunes que pueden requerir la colocación de implantes dentales:

• Pérdida de dientes debido a caries o enfermedad periodontal. Cuando los dientes están gravemente dañados o han sido extraídos debido a estas afecciones, los implantes dentales se convierten en una opción viable para restaurar la sonrisa y la función masticatoria.
• Traumatismo o lesiones: Los accidentes o lesiones pueden causar la pérdida de uno o varios dientes. En tales casos, los implantes dentales pueden ser utilizados para reemplazar los dientes ausentes y restaurar la apariencia y la funcionalidad de la boca.
• Problemas congénitos o genéticos: Algunas personas pueden nacer sin ciertos dientes o con dientes malformados. Los implantes dentales ofrecen una solución efectiva en estos casos.
• Desgaste dental y envejecimiento. Con el paso del tiempo, los dientes pueden desgastarse, volverse frágiles o incluso caerse debido a la debilitación ósea asociada al envejecimiento. Los implantes dentales permiten mejorar la calidad de vida de las personas mayores que han experimentado esta pérdida.
   

¿Cómo es el procedimiento?

El proceso siempre ha de llevarlo a cabo odontólogo especializado en implantología. A través de una cuidadosa evaluación y planificación, se determina la viabilidad del tratamiento y se establece un plan personalizado para cada paciente.

Así pues, el procedimiento habitual consiste en los siguientes pasos:

1. En primer lugar, se lleva a cabo una radiografía o tomografía computarizada para evaluar la cantidad y calidad del hueso disponible. Si es necesario, puede ser oportuno realizar un injerto óseo para fortalecer el área de implantación. Una vez se ha determinado que el paciente es un buen candidato, se programa la cirugía de colocación de los implantes.
2. A continuación, se inyecta anestesia local para garantizar la comodidad del paciente durante la cirugía y, a través de una incisión mínima en las encías, se coloca el implante dental en el hueso.
3. Por último, se sutura el área para permitir la cicatrización. Durante varios meses, el implante se fusionará con el hueso circundante en un proceso llamado osteointegración.
4. Una vez que completada la fase de cicatrización, se realiza la segunda etapa del procedimiento, consistente en la colocación de un pilar o conector en el implante, que servirá como base para la prótesis dental.
5. A continuación, se toman impresiones digitales o convencionales de la boca del paciente, para diseñar y fabricar una prótesis dental personalizada que se ajuste perfectamente a su estructura oral.
    

Beneficios de la implantología dental

  La implantología dental ofrece numerosos beneficios, tanto estéticos, como funcionales para los pacientes. Algunos de estos beneficios son:

• Proporcionan una apariencia natural y mejoran la estética dental, ya que se adaptan perfectamente a la estructura facial del individuo. Esto permite a los pacientes recuperar su confianza en sí mismos y sonreír sin preocupaciones.
• Ofrecen una función masticatoria mejorada. A diferencia de las dentaduras postizas convencionales, que pueden deslizarse o dificultar la pronunciación, los implantes dentales son firmes y estables. Esto permite a los pacientes disfrutar de una alimentación variada y hablar con claridad, sin preocuparse por posibles inconvenientes.
• Tienen una extensa durabilidad. Los implantes dentales, con el cuidado adecuado, pueden durar toda la vida, lo que los convierte en una inversión a largo plazo para la salud oral de los pacientes.
• Al reemplazar los dientes perdidos o dañados, los implantes previenen la pérdida ósea y el desplazamiento de los dientes adyacentes, lo que ayuda a mantener una estructura oral saludable.