Avances en cirugía mínimamente invasiva de la hernia discal
Las hernias discales cervicales y lumbares son una causa frecuente de dolor y discapacidad, afectando la calidad de vida de los pacientes. Estas patologías ocurren cuando el núcleo pulposo del disco intervertebral se desplaza y comprime las estructuras nerviosas, generando síntomas como dolor, hormigueo, debilidad o incluso alteraciones motoras. Afortunadamente, los avances en técnicas mínimamente invasivas han revolucionado el tratamiento, reduciendo el tiempo de recuperación y mejorando los resultados clínicos.
¿Cuál es el tratamiento de la hernia discal?
El abordaje terapéutico de la hernia discal depende de la gravedad de los síntomas y la respuesta al tratamiento conservador.
Tratamiento conservador
En la mayoría de los casos, el tratamiento inicial es no quirúrgico y tiene como objetivo reducir el dolor y mejorar la movilidad:
- Reposo relativo: evitar actividades que aumenten la presión sobre la columna.
- Fisioterapia y rehabilitación: ejercicios de fortalecimiento y técnicas de estiramiento para mejorar la estabilidad de la columna.
- Medicamentos: analgésicos, antiinflamatorios y relajantes musculares para aliviar el dolor.
- Infiltraciones epidurales: inyección de corticosteroides para reducir la inflamación de las raíces nerviosas.
Si después de varias semanas no hay mejoría o los síntomas neurológicos progresan, se considera la opción quirúrgica.
Avances en cirugía mínimamente invasiva para hernia discal
Las técnicas mínimamente invasivas han transformado el tratamiento de la hernia discal, permitiendo intervenciones más seguras, con menor daño tisular y una recuperación más rápida. Entre las opciones más innovadoras se encuentran:
Microdiscectomía
- Se realiza a través de una pequeña incisión y con ayuda de un microscopio quirúrgico.
- Permite la extracción del fragmento herniado con mínima alteración de los tejidos circundantes.
- Es la técnica más utilizada para hernias lumbares y cervicales con excelente tasa de éxito.
Cirugía endoscópica de columna
- Se emplea un endoscopio con una microcámara para acceder al disco herniado a través de una incisión de pocos milímetros.
- Disminuye el daño muscular, reduce el dolor postoperatorio y permite una recuperación más rápida.
- Indicada para hernias contenidas y extruidas en pacientes seleccionados.
Nucleoplastia con radiofrecuencia o láser
- Se introduce una sonda dentro del disco afectado para aplicar energía térmica que reduce la presión del núcleo pulposo.
- Procedimiento ambulatorio con mínima agresión a los tejidos.
- Eficaz en casos iniciales sin compresión severa de la raíz nerviosa.
Discogel (inyección intradiscal de etanol gelificado)
- Técnica novedosa que consiste en la infiltración de una sustancia que deshidrata el núcleo pulposo, reduciendo la hernia.
- Indicado para hernias pequeñas y en pacientes con contraindicación para cirugía convencional.
Prótesis discales y fusión intersomática
- En casos de hernias severas con degeneración avanzada del disco, se pueden colocar prótesis para preservar el movimiento o realizar una fusión vertebral para estabilizar la columna.
- Las nuevas técnicas de fusión mínimamente invasiva, como ALIF, TLIF y XLIF, permiten una recuperación más rápida y menor afectación muscular.
A modo de conclusión, se puede decir que el tratamiento de la hernia discal ha evolucionado significativamente gracias a las técnicas mínimamente invasivas. Estas innovaciones permiten intervenciones más seguras, con menor daño tisular y una recuperación más rápida en comparación con la cirugía convencional. La elección del tratamiento adecuado debe ser individualizada, considerando las características del paciente y la severidad de la patología. La combinación de avances tecnológicos y un enfoque multidisciplinario sigue mejorando la calidad de vida de los pacientes con hernia discal cervical y lumbar.