Cirugía mínimamente invasiva de juanetes: una opción para corregir los juanetes definitivamente

Editado por Alicia Arévalo el 30/11/2024

¿Qué son los juanetes?

El hallux valgus o juanetes es una deformidad progresiva y compleja que afecta a la parte delantera del pie.
 

Los signos más evidentes son la desviación del dedo gordo y la protuberancia ósea a nivel de la articulación del primer dedo del pie. La desviación que se produce del primer dedo del pie hacia el segundo, junto con el crecimiento óseo en la parte externa provocado por el juanete, hace que se inflame la articulación, produzca dolor y pueda ser la causa de otras deformidades asociadas en los dedos, como los dedos en garra, martillo o cuello de cisne.

 

¿Por qué aparecen los juanetes?

Los juanetes ocurren casi exclusivamente en personas que llevan zapatos, por eso es muy raro verlo en poblaciones que acostumbrar a andar descalzos.
 

El crecimiento de la deformidad se produce de forma gradual a lo largo de la vida, aunque, en algunos casos, puede evolucionar en menos tiempo.
 

El aumento de tamaño de ésta deformidad se debe a un conjunto de factores:

  • Continúa presión que ejerce el zapato sobre la protuberancia ósea.
  • Otros factores que intervienen en su crecimiento son: el tipo de pie (plano, valgo), la hiperlaxitud o acortamiento anormal del primer metatarsiano, traumatismos, enfermedades inflamatorias, como la artritis reumatoide y finalmente, el calzado de punta estrecha y tacón alto son factores importantes en el desarrollo de la deformidad.
El calzado de punta estrecha y tacón alto son factores importantes en el desarrollo del juanete.
 


¿Qué provocan los juanetes?

El dolor se produce principalmente en la propia deformidad, en la articulación del primer dedo o en la parte dorsal del pie. En importante recordar, que los juanetes suelen producir otras deformidades, como los dedos en garra.
 

Los principales síntomas son los siguiente:

  • Dolor e inflamación: el síntoma principal es el dolor que se produce en la parte externa del primer dedo del pie. La articulación se hincha y enrojece causando dolor que puede llegar a ser incapacitante. La deformidad del hueso se inflama con el roce del calzado formando una bursitis dolorosa (acúmulo de líquido inflamatorio). Estos síntomas empeoran cuando se camina o se está de pie mucho tiempo.
  • Callosidades y ampollas dolorosas: la desviación del dedo gordo hacia el segundo causa deformidades en los otros dedos que a su vez producen callosidades tanto en el dorso de los dedos como en la planta del pie. Éstas pueden producir metatarsalgia, qué es el dolor en la parte delantera de la planta del pie. Asimismo, el área del juanete puede presentar callosidades producidas por el roce o por presión.
  • Dolor por rigidez del dedo gordo: La deformidad del juanete tiene asociada con frecuencia cierto grado de artrosis. La rigidez produce limitación del movimiento del dedo gordo del pie y ésta a su vez puede causar dolor, hipersensibilidad y entumecimiento especialmente con calzado de tacón alto.

 

En general, todos estos síntomas, pueden mejorar temporalmente con las recomendaciones que describimos en otro apartado. Sin embargo, con el tiempo y según evolucione, estas medidas dejarán de ser efectivas. Por eso, es importante recordar que el mejor y único tratamiento para los juanetes es la cirugía.

 

¿En qué casos se recomienda la cirugía mínimamente invasiva de juanetes?

Esta deformidad es aconsejable tratarla a tiempo, debido a que cuanto más severa sea y/o afecte a los demás dedos, el tratamiento quirúrgico es más complejo y puede no tener los resultados esperados.
 

Si usted tiene juanetes, no espere más y consulte con un podólogo, pues el tiempo sólo agravará su problema. El especialista deberá de realizar una exploración completa del pie que deberá incluir radiografías. Esto permitirá establecer el grado de deformidad de los juanetes y otras deformidades, si existen.

 

¿En qué consiste la cirugía mínimamente invasiva de juanetes?

Los juanetes pueden ser leves, moderados y severos. En éstos últimos, la protuberancia ósea suele estar acompañada de una desviación del dedo gordo que suele afectar al segundo dedo llegando a deformarlo. Es estos casos, es muy importante realizar la cirugía para corregir los juanetes y, así, evitar la deformidad de los dedos en garra y/o martillo.

 

La cirugía de juanetes por técnica mínima invasiva o percutánea puede ser una opción para corregir los juanetes definitivamente y prevenir el desarrollo de dedos en garra y/o martillo.

 

Dependiendo del grado de deformidad de los juanetes se puede realizar dos técnicas mínimamente invasivas para la corrección de los juanetes:

  • Cirugía de juanetes o hallux valgus leves sin fractura (sin osteotomía): la cirugía mínima invasiva o percutánea permite la resección simple de la deformidad ósea del juanete, la cual conlleva un postoperatorio de 7 días sin apenas molestias y con plena movilidad. Se realiza con anestesia local y no requiere ningún tipo de tornillo ni clavo. Esta cirugía debe ser realiza por especialistas del pie con gran experiencia con estas técnicas y con una aparatología e instrumentación especial.
  • Cirugía de juanetes o hallux valgus moderado-severo con fractura (con osteotomía): en casos más avanzados de juanetes donde existe una importante desviación del dedo gordo que puede o no afectar al segundo dedo, se debe realizar la resección de la protuberancia ósea del juanete y la corrección de los ángulos correspondientes. En los casos donde además haya deformidad de dedos en garra y/o martillo, se deberá realizar su corrección en el mismo acto quirúrgico.

 

Es posible realizar todos estos procedimientos con técnica mínima invasiva o percutánea sin necesidad de utilizar tornillos ni clavos, tanto para la corrección del juanete como para los dedos en garra y/o martillo.

 

¿Cómo es el postoperatorio de la técnica mínima invasiva?

 

El postoperatoria de esta cirugía suele ser de 40 días, durante los cuales el paciente está caminando desde el primer día con ayuda de un zapato post-quirúrgico especial para estas técnicas.
 

Se debe acudir al especialista o podólogo para realizar un estudio completo del pie que suele requerir: exploración física del pie y miembros inferiores, radiografías digitales, estudio computarizado de la pisada y, finalmente, una ecografía vascular de miembros inferiores.
 

El especialista deberá explicarle de una forma clara y precisa la mejor opción quirúrgica dependiendo no sólo del grado de deformidad sino también la edad del paciente y sus enfermedades asociadas. Finalmente, una vez el paciente haya entendido el procedimiento podrá tomar una decisión sobre la cirugía.

Podología en Alicante (Alacant)