Avances científicos en la artrosis: un nuevo paradigma
La artrosis u osteoartritis es un grupo heterogéneo de enfermedades con manifestaciones clínicas similares y con cambios radiológicos comunes. Anteriormente se describía como una sola enfermedad, pero este concepto está cambiando.
Recientemente la Osteoarthritis Research Society International ha definido la artrosis como un trastorno que afecta a las articulaciones móviles, que se caracteriza por estrés celular y degradación de la matriz extracelular del cartílago, iniciada por la presencia de micro y macro lesiones que activan respuestas de reparación mal adaptadas, entre las que se incluyen las vías proinflamatorias de la inmunidad innata.
¿En qué consiste la artrosis?
A menudo, la artrosis se conoce como una enfermedad articular degenerativa, sin embargo, éste es un nombre inapropiado porque no es simplemente un proceso de desgaste, sino una remodelación anormal de los tejidos articulares impulsada por una serie de mediadores inflamatorios dentro de la articulación afectada.
Además, también puede haber cambios en los músculos periarticulares, nervios y bursas. Todos estos cambios patológicos en los tejidos articulares son el motivo para considerar la artrosis como una enfermedad de la articulación, entendida como un órgano que no funciona correctamente.
Impacto laboral y epidemiología mundial
La Organización Mundial de la Salud estima que para el año 2050, 130 millones de personas sufrirán artrosis en todo el mundo y 40 millones estarán gravemente discapacitadas, lo que refleja la importante carga social de esta enfermedad.
La artrosis puede afectar a cualquier articulación, pero las más frecuentes en mayores de 40 años según el estudio EPISER 2016 (con una muestra de 3.336 españoles) se localizan por orden de prevalencia en las zonas lumbar 15%, cervical 10%, manos 8% y cadera 5%.
Síntomas clínicos y diagnóstico fenotípico
El dolor y la rigidez, particularmente al iniciar la actividad y después de la misma son los principales síntomas de consulta. Estos síntomas acaban generando un impacto considerable en la capacidad para realizar las actividades de la vida diaria si no son tratados correctamente.
Actualmente podemos describir 4 fenotipos principales para la artrosis que tienen implicaciones en su orientación terapéutica:
- Inflamatorio: las artritis generan un daño en el cartílago, sinovial y hueso subcondral cuya inflamación daña y destruyelos tejidos afectados.
- Metabólico: alteración de la homeostasis del organismo, muchas veces asociada a otras disfunciones del sistema hormonal y cardiocirculatorio.
- Sensibilización central: generado tras un dolor crónico no tratado que perpetúa el mismo y genera más disrupción en la salud física y mental.
- Senescencia: debido principalmente al desgaste progresivo por el envejecimiento de la articulación y la pérdida y tono muscular.
Tratamientos personalizados y medicina de precisión
Este nuevo enfoque clasificatorio de la artrosis va de la mano de la denominada Medicina de precisión. Este novedoso concepto médico se basa en adaptar cada tratamiento o conjunto de tratamientos al paciente concreto dependiendo del estadio y momento evolutivo de su enfermedad, teniendo en cuenta diferentes dimensiones: bioquímica o molecular, funcional de órgano o tejido, clínica sintomática, sensibilización central del dolor y contexto psicosocioemocional.
En concreto las terapias para la artrosis pueden ir dirigidas a disminuir la inflamación, a normalizar el metabolismo, a desensibilizar el dolor, a preservar la integridad de la articulación: músculos y huesos, y también a regenerar los tejidos afectos.
Ventajas de la Medicina regenerativa
En este último sentido la Medicina regenerativa representa un avance evolutivo muy importante para estos pacientes, pudiendo ofrecer tratamientos biológicos autólogos sin efectos secundarios para tratar el dolor, la inflamación y activar los procesos regenerativos naturales.
En definitiva, ante un problema de artrosis se aconseja siempre consultar a un especialista en Reumatología para diagnosticar correctamente su fenotipo de la enfermedad y poder diseñar un buen “traje a medida”.