Apnea Obstructiva del Sueño: cuando roncar deja de ser inofensivo
Escrito por:Hasta hace poco tiempo, roncar ha generado chistes y bromas, y sobre todo una molestia para los que tenían que convivir con el roncador. Sin embargo, cuando se descubrió que los ronquidos no son tan inofensivos, sino que pueden esconder una patología importante, dejaron de ser un objeto de burla.
Se trata de la Apnea Obstructiva del Sueño, un problema que surge durante el sueño con episodios en los que se da una oclusión de las vías aéreas superiores. La apnea afecta a cerca de un 6% de los hombres y a y 2% de las mujeres, y en España se estima que existen entre un millón y medio y dos millones de afectados.
Cuando una persona está durmiendo, los músculos se encuentran relajados y se pierde la coordinación motora entre diafragma y faríngeos. Cuando sucede esto, la parte superior de la faringe se ve colapsada y la respiración cesa durante varios segundos. Esta interrupción es habitual en una buena cantidad de personas, pero no suele superar los dos o tres segundos. Si se producen ronquidos violentos y la apnea se extiende durante más de diez segundos, probablemente el paciente tenga el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño.
Como tal, el ronquido está presente entre un 10 y un 30% de las mujeres y entre un 50 y un 60% de los hombres, aunque tan solo entre un 5 y un 10% se asocian con el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS).
Factores de riesgo del Síndrome Obstructivo de Apnea del Sueño en adultos
Cuando hay apnea, la respiración se detiene, y la sangre no se ve nutrida con el oxígeno, por lo que en los músculos respiratorios se aumenta el número de movimientos abdominales y torácicos para superar la obstrucción.
La apnea se acaba con un ronquido estertoso, que genera un minidespertar, después del cual se reinicia el proceso. Estos despertares cortos impiden un descanso adecuado y reparador, provocando hipoxemia.
Este mal descanso afecta a las personas y aumenta el número de accidentes, de bajo rendimiento labora… A su vez, en los afectados son habituales los problemas de hipertensión arterial y/o la cardiopatía isquémica.
Consecuencias de la apnea
Lo más frecuente es que la persona que convive con el afectado sea la primera en darse cuenta de lo que sucede. Los síntomas habituales son los siguientes:
- Síntomas nocturnos
- Ronquidos
- Pausas de apnea prolongadas
- Sensación de despertar muy brusca y que en ocasiones puede acompañarse de asfixia
- Síntomas diurnos
- Somnolencia excesiva
- Irritabilidad
- Depresión
- Ansiedad
- Deterioro de intelectualidad
- Pérdida de libido
Cuando se produce una asociación de varios signos, es posible que sea un SAOS, por lo que se deberá acudir a un especialista.
La cirugía del ronquido
- Existen diversas operaciones mediante las cuales se pueden tratar los ronquidos:
- La uvulopalatofaringoplastia o resección parcial del paladar blando
- La uvulopalatoplastia láser (LAUP, Laser Assisted Uvulo-Palatoplasty)
- El tratamiento quirúrgico por radiofrecuencia
- La amigdalotomía con/sin adenoidectomía (exéresis de las vegetaciones)
- La cirugía nasal: desviaciones del tabique, pólipos nasales…
- La cirugía con implantes de paladar
- La traqueotomía
Que una intervención sea eficaz caría en función de la posibilidad de ubicar exactamente la ubicación anatómica de los sitios responsables de la obstrucción y corregirlos. Entonces, debe mencionarse que la cirugía no es útil en todos los casos, sino que cada procedimiento se puede adaptar mejor a cada persona.
Si se ha realizado un buen estudio y se selecciona un tratamiento adecuado, el ronquido podrá disminuir hasta un 75%.